El capitán (ambidiestro) más versátil

Nacho tiene 22 años y vive en Meco con su familia, su hermano Álex (mediocentro del Castilla) y otra hermana. Tiene una novia de toda la vida. Le queda una asignatura para terminar INEF. Siempre ha conciliado el fútbol y los estudios. Cuesta encontrar un técnico de los que ha tenido que le saque un defecto. Todos contestan con la misma frase cuando se les pregunta por el capitán del Castilla: “Es muy centrado, de andar por casa: maduro, sensato, responsable y tranquilo”.

Nacho creció en La Fábrica, a la que llegó con 11 años. Empezó en el Alevín A y pasó por todas las categorías. Esta t...

Nacho tiene 22 años y vive en Meco con su familia, su hermano Álex (mediocentro del Castilla) y otra hermana. Tiene una novia de toda la vida. Le queda una asignatura para terminar INEF. Siempre ha conciliado el fútbol y los estudios. Cuesta encontrar un técnico de los que ha tenido que le saque un defecto. Todos contestan con la misma frase cuando se les pregunta por el capitán del Castilla: “Es muy centrado, de andar por casa: maduro, sensato, responsable y tranquilo”.

Nacho creció en La Fábrica, a la que llegó con 11 años. Empezó en el Alevín A y pasó por todas las categorías. Esta temporada, igual que Morata, forma parte de la primera plantilla. Se entrena a diario con José Mourinho y, cuando no va convocado, juega a las órdenes de Toril. Así, ha disputado siete de los nueve partidos de Segunda. En el Castilla sigue luciendo el brazalete. “Era el líder en el campo, pero también fuera de él. Los compañeros siempre le votaban cuando tocaba elegir capitán”, cuenta Tristán Celador que le tuvo en el Juvenil B. “Era central, pero le íbamos alternando en el lateral derecho. Más tarde ha ido ocupando los cuatro puestos de la defensa e incluso ha jugado de mediocentro”. añade.

Con el primer equipo, Nacho siempre ha jugado de lateral izquierdo

Con el primer equipo, Nacho siempre ha jugado de lateral izquierdo: en la Copa, contra la Ponferradina; en Valencia, cuando debutó en abril de 2011, ante el Zaragoza a la semana siguiente.Muy competitivo, sabe mezclar concentración, intensidad y garra. “Nunca le asustan los partidos. Es muy rápido. No es de esos centrales de muchos centímetros, pero lo suple con el sentido táctico. En el lateral va perfecto porque, además, maneja bien la pelota y no tiene problemas cuando hay que cruzar el centro del campo”, apunta Celador. Siempre se ha manejado con las dos piernas. Tanto que, como dice Lopetegui, el seleccionador español sub-21, “no se sabe si es diestro o zurdo”.