Red Bull sigue en su línea

Advertía Sebastian Vettel al llegar a Corea de que el circuito de Yeongam debía adaptarse teóricamente bien al RB8, el monoplaza que conducen tanto él como Mark Webber y que se ha hecho el remolón hasta hace un par de carreras. A partir del Gran Premio de Singapur, el bólido energético parece otro, absolutamente fuera del alcance de los demás, sin importar si se mide a un Ferrari, un McLaren o un Lotus. Hasta hace un mes, su principal punto fuerte se limitaba prácticamente a la eficiencia aerodinámica, un parámetro a tener muy en cuenta pero no el único en un trazado como este, que además de u...

Advertía Sebastian Vettel al llegar a Corea de que el circuito de Yeongam debía adaptarse teóricamente bien al RB8, el monoplaza que conducen tanto él como Mark Webber y que se ha hecho el remolón hasta hace un par de carreras. A partir del Gran Premio de Singapur, el bólido energético parece otro, absolutamente fuera del alcance de los demás, sin importar si se mide a un Ferrari, un McLaren o un Lotus. Hasta hace un mes, su principal punto fuerte se limitaba prácticamente a la eficiencia aerodinámica, un parámetro a tener muy en cuenta pero no el único en un trazado como este, que además de un tramo muy revirado también esconde un tramo recto. Desde la incorporación del doble DRS en el alerón trasero, la velocidad punta ya no es un problema para la tropa de Milton Keynes. “Lo importante aquí es tener un coche equilibrado, porque esta pista tiene una zona de curvas enlazadas pero también dos rectas largas”, argumenta Adrian Newey, director técnico de la estructura de la marca austríaca.

Al volante de este renovado prototipo, Vettel se ha convertido en el primero que este año ha sido capaz de imponerse dos veces de forma consecutiva (Singapur y Japón), y todo apunta a que el alemán lo tiene todo de cara para completar un tres en raya. El domingo pasado, en Japón, Red Bull monopolizó la primera línea de la parrilla, algo que hasta ese momento no había logrado aún, y su Webber no pudo acompañar a Baby Schumi el domingo se debió, en gran medida, a la sobreexcitación que invade en el momento de la salida a Romain Grosjean, que se llevó a puesto al australiano antes de llegar a la primera curva.

Una semana después del paseo que se dio por Suzuka, Vettel volvió a marcar la pauta en la primera jornada de ensayos en Yeongam, donde consiguió el mejor registro con tres décimas de ventaja respecto a Webber, el segundo, mientras que Alonso cruzó la meta con el tercer mejor tiempo, prácticamente idéntico al del australiano.

Con las reservas que se merece cualquier conclusión extraída a partir de las impresiones que ofrece cualquier viernes, todo señala en una dirección similar a la que definió la última prueba celebrada hasta ahora, aquella que coloca a Red Bull un paso por delante del resto y que este sábado (7:00 horas, Antena 3 y TV3) deberá confirmarse o no.