El Levante se deja tres puntos en Hannover

El Levante ha caído ante el Hannover en el segundo encuentro de la fase de grupos de la Liga Europa (2-1). El conjunto español se adelantó en el marcador por medio de un penalti transformado por Míchel. El penalti, antes de los diez minutos de juego, se cobró también la expulsión de Haggui, uno de los centrales del equipo alemán. Miel sobre hojuelas para el Levante. Sin embargo, el equipo levantinista no solo no aprovechó la superioridad numérica de la que dispuso durante más de ochenta minutos, sino que acabó perdiendo los tres puntos ante, primero, el empuje del Hannover y, luego, su resiste...

El Levante ha caído ante el Hannover en el segundo encuentro de la fase de grupos de la Liga Europa (2-1). El conjunto español se adelantó en el marcador por medio de un penalti transformado por Míchel. El penalti, antes de los diez minutos de juego, se cobró también la expulsión de Haggui, uno de los centrales del equipo alemán. Miel sobre hojuelas para el Levante. Sin embargo, el equipo levantinista no solo no aprovechó la superioridad numérica de la que dispuso durante más de ochenta minutos, sino que acabó perdiendo los tres puntos ante, primero, el empuje del Hannover y, luego, su resistencia.

Primero Hustzi, apenas diez minutos después del tanto de Míchel, y después Konan Ya, recién comenzada la segunda parte, dieron la vuelta al encuentro, que por momentos pareció más una batalla que un partido de fútbol. El equipo alemán suplió la inferioridad sobre el campo con intensidad, y del envite salió especialmente vencedor el húngaro Hustzi, que no solo transformó el penalti, sino que estuvo a punto de transformar un córner mágnificamente botado en un tanto olímpico.

Al Levante, espeso, quizá acogotado por las ausencias de algunos de los jerarcas del equipo (ausentes David Navarro, Papa Diop y Barkero, por decisión técnica, y Martins, porque no fue inscrito a tiempo para disputar la competición), no le bastaron los 80 minutos. Ni Gekas, ni El Zhar, ni Ángel acertaron a batir a Zieler, un muro que se hizo cada vez más compacto, más entero. Y aunque Juan Ignacio Martínez dispuso toda su artillería sobre el campo, al menos de la disponía en Alemania, no fue suficiente y el Levante se dejó el liderato de su grupo en un partido que a los ocho minutos podía parecer fácil.