El ‘hombre Mourinho’

Essien es el jugador ideal para el entrenador del Madrid por su repliegue físico y su fortaleza

Michael Essien muestra la camiseta que llevará-JuanJo Martin (EFE)

En su imaginario, los entrenadores construyen equipos imbatibles. En ese ejercicio innato a su profesión, a los técnicos les florecen jugadores innegociables, piezas maestras de sus pizarras, dovelas tácticas, sin las que les es imposible idear ese once ideal indestructible. Devoto de las “estructuras equilibradas”, si hay un futbolista que ocupa ese lugar en el pensamiento futbolístico del entrenador de José Mourinho ese es Michael Essien (Ghana, 1982). Por él pagó cerca de 40 millones de euros al Olympique de Lyon en 2005. “Es un atleta, es capaz de correr las 24 horas”, le definió por enton...

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En su imaginario, los entrenadores construyen equipos imbatibles. En ese ejercicio innato a su profesión, a los técnicos les florecen jugadores innegociables, piezas maestras de sus pizarras, dovelas tácticas, sin las que les es imposible idear ese once ideal indestructible. Devoto de las “estructuras equilibradas”, si hay un futbolista que ocupa ese lugar en el pensamiento futbolístico del entrenador de José Mourinho ese es Michael Essien (Ghana, 1982). Por él pagó cerca de 40 millones de euros al Olympique de Lyon en 2005. “Es un atleta, es capaz de correr las 24 horas”, le definió por entonces el luso, un “padre” para el futbolista.

Con El Bisonte en el eje, apodo que le acompaña desde sus tiempos en el Lyon, aquel Chelsea de Mourinho se convirtió en una apisonadora física que dominó con autoridad la Premier League y acechó de cerca la Liga de Campeones. Un equipo que ganaba por aplastamiento desde la secuencia robo-pase-remate que encadenaban principalmente Essien, Lampard y Drogba. Aunque no pudo concretarlo, Mourinho ya imaginó al Inter con Essien, hijo de una panadera y admirador de Roy Keane, con el que coincidió en una prueba que no pasó con el Manchester United con apenas 17 años.

La misma noche de mayo de 2008 que el Chelsea perdió la final de la Liga Campeones recibió un mensaje, destituido del club londinense esa misma temporada: “Voy al Inter. Espero que algún día tú también”. Essien es el ‘hombre Mourinho’ por excelencia y tampoco ha podido diseñar el Real Madrid sin incrustarlo en su proyecto pese a las dos graves lesiones en ambas rodillas que en la última temporada solo le permitieron disputar 20 partidos. Probablemente no habrá otro fichaje que seduzca y llene más a Mourinho, que lo describe así en una entrevista a Fifa Magazine: “Puede jugar en cada puesto del centro del campo, donde siempre elige bien. Presiona, guarda la posición, juega a uno o dos toques, en largo o en corto y marca los tiempos del juego, lento o rápido, según conviene”. En aquel Chelsea llegó a utilizarlo como central en ausencia de Terry y también como lateral derecho.

Pagó por él 40 millones para llevarlo al Chelsea, y también quiso ficharlo para el Inter

El mediocentro ghanés es lo que Mourinho en su dialéctica de clan describe como “uno de los nuestros”. Un futbolista que interpreta su libreto con los ojos cerrados -“sus habilidades tácticas son brillantes”-, el tercer mediocentro con el que no hubiera necesitado adelantar a Pepe para tratar de cortocircuitar al Barcelona si se hubiera cumplido su deseo de llegar de la mano con él al Madrid en el verano de 2010. Ahora, en su imaginario de confeccionar un equipo más sólido y fiable en las citas en las que crea conveniente, se le configura un triángulo de presión formado por Alonso, Khedira y Essien, con el que, al contrario que Lass, también gana un adepto incondicional a su metodología y a su carácter. “Mourinho es el mejor entrenador que he tenido, sabe cómo sacar lo mejor de cada jugador en cada momento y lo que necesita. En los entrenamientos es uno más”, le ha elogiado Essien, el ‘hombre Mou’. Ayer, fue presentado: "Me llamó mi padre. Me dijo que estaría encantado de que estuviera aquí. Le dije que sí, que estaba preparado para trabajar".

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