El Madrid, una marabunta

El equipo de Mourinho realizó frente al Zaragoza 39 remates, el mejor registro en la era Mourinho

El Madrid fue un ciclón, con las líneas adelantadas, sin complejo alguno, con la intensidad por bandera, con el ataque por argumento. Lo padeció el Zaragoza, desarticulado a las primeras de cambio, un juguete en sus botas. Ya lo había avisado José Mourinho, el técnico, en la rueda de prensa previa. "Estamos jugando mucho mejor que la temporada pasada y este año seremos un equipo mejor de lo que fuimos el curso anterior". El partido de ayer no dejó lugar a dudas. El Madrid fue una auténtica marabunta que se llevó por delante a un Zaragoza (0-6) destartalado. Hay una estadística, tan expresiva c...

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El Madrid fue un ciclón, con las líneas adelantadas, sin complejo alguno, con la intensidad por bandera, con el ataque por argumento. Lo padeció el Zaragoza, desarticulado a las primeras de cambio, un juguete en sus botas. Ya lo había avisado José Mourinho, el técnico, en la rueda de prensa previa. "Estamos jugando mucho mejor que la temporada pasada y este año seremos un equipo mejor de lo que fuimos el curso anterior". El partido de ayer no dejó lugar a dudas. El Madrid fue una auténtica marabunta que se llevó por delante a un Zaragoza (0-6) destartalado. Hay una estadística, tan expresiva como contundente, que habla por sí sola: el Madrid remató en 39 ocasiones -16 de ellas a portería-, la vez que más en la era Mourinho. Hasta entonces, el registro estaba en 32 disparos, realizados frente al Sporting, la noche en que el equipo perdió (0-1) por primera vez -la otra fue, precisamente, ante el Zaragoza- en su estadio. "Esto es fútbol y mañana es domingo", se contentó en resumir entonces Mourinho. Ayer, sin embargo, no hubo reproche alguno. Tampoco motivo.

Los números del Madrid son más rotundos al compararlos con los de la temporada pasada. Los blancos remataron entonces 708 veces, lo que da una media de algo más de 18 por partido, menos de la mitad de los que realizó ayer. Pero este año, quizá por la forma física, quizá porque las bases defensivas ya están asentadas, el equipo entiende un fútbol más ofensivo. Sin ir más lejos, a pesar de perder la Supercopa ante el Barcelona, los registros lo aclaran. El año pasado, en la sucesión de los cuatro clásicos consecutivos, el Madrid chutó un total de 28 veces (8 en la ida de la Champions, 9 en la Liga, 2 en la vuelta de la Champions y 9 en la Copa). En la reciente Supercopa, sin embargo, sumó 13 remates en cada encuentro. O, lo que es lo mismo, casi los mismos remates en dos partidos que en los cuatro disputados en el ejercicio pasado. Todo un cambio.

Además de remate y gol, algo de lo que ya dio muestras el equipo cuando se echó el telón al curso anterior -goleadas al Valencia (3-6), al Sevilla (2-6) y al Almería (8-1)-, este Madrid también tiene más posesión del balón. En la Romareda tuvieron un 63,41% de posesión, un aumento considerable si se tiene en cuenta que el año anterior, a domicilio, su posesión del balón se quedó en 47,8%. Algo que no cambia, sin embargo, es la capital presencia de Cristiano Ronaldo en el ataque, que realizó casi la mitad de los remates (15) de su equipo, de los que siete fueron a portería y tres se convirtieron en dianas. Benzema también estuvo activo, aunque tuvo menos suerte de cara al gol que el portugués. El francés remató nueve veces, pero se fue sin marcar y fue sustituido por Higuaín en el minuto 75 del partido. En el Zaragoza, por el contrario, ni un solo jugador consiguió rematar más de una vez.

La agresividad del Madrid se mide también en las actuaciones de los dos porteros ayer. Casillas intervino en el juego 15 veces e hizo solo una parada -el año pasado hacía de media tres por partido-, mientras que Roberto, el guardameta del Zaragoza, que salvó a su equipo de algo peor, realizó 49 intervenciones y 10 estiradas. La defensa blanca también fue un muro: solo entre Pepe, Marcelo y Coentrâo robaron 34 balones, lo que da idea de las dificultades de los de Aguirre para mantener el balón. El Madrid, además, consiguió elaborar el juego, como muestra el dato de pases buenos: 490 - la media del año pasado es de 438- por 224 del Zaragoza. Números que expresan la fiereza del Madrid, la propuesta de jugar al ataque.

Los jugadores del Madrid celebran un gol ante el Zaragoza.JAVIER CEBOLLADA (EFE)

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