"Simoncelli es una caradura"

Pedrosa y Lorenzo, los dos damnificados por el estilo agresivo del italiano unen fuerzas para evitar que se repitan incidentes similares

Cuando Marco Simoncelli se encontró con Pedrosa ayer en Mugello, cuatro carreras después del incidente que provocó la caída y fractura de la clavícula derecha del piloto español, le tendió la mano. Y Pedrosa le negó el saludo. "Una persona que hizo lo que hizo, que ha dicho lo que ha dicho, que dice que me envió un mensaje cuando es mentira, no puede pretender llegar como si no hubiera pasado nada. Si me hubiera llamado el domingo por la noche después de la carrera de Le Mans todo hubiera sido distinto, pero no lo hizo. Es un caradura", explica él.

Cuando Jorge Lorenzo, a quien el itali...

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Cuando Marco Simoncelli se encontró con Pedrosa ayer en Mugello, cuatro carreras después del incidente que provocó la caída y fractura de la clavícula derecha del piloto español, le tendió la mano. Y Pedrosa le negó el saludo. "Una persona que hizo lo que hizo, que ha dicho lo que ha dicho, que dice que me envió un mensaje cuando es mentira, no puede pretender llegar como si no hubiera pasado nada. Si me hubiera llamado el domingo por la noche después de la carrera de Le Mans todo hubiera sido distinto, pero no lo hizo. Es un caradura", explica él.

Cuando Jorge Lorenzo, a quien el italiano también arrastró por los suelos la semana pasada en Assen al cometer un error en la primera vuelta, se ha encontrado con Simoncelli esta tarde de viernes le ha dado la mano y ambos han iniciado una acalorada conversación. "Yo no tengo ningún problema personal con él, he intentado hablarlo porque parecía que estaba dispuesto a reconocer que se equivoca, pero me he dado cuenta de que es imposible; se pone en seguida a la defensiva y sigue insistiendo en que él no hace nada mal. Como decía Dani ayer, de donde no hay no se puede sacar", ha concluido Lorenzo, que abandonaba los despachos de Dorna, donde se celebró la habitual reunión de la comisión de seguridad, recriminándole en italiano al piloto de Honda que no haya aprendido la lección: "No has entendido nada".

Era la primera vez en muchísimo tiempo que Pedrosa asistía a este encuentro de los pilotos con los responsables de la dirección de carrera y Dorna, organizadora del mundial, cuya presencia no es obligatoria para los pilotos. Lorenzo le pidió que lo hiciera -"Es bueno hablar las cosas, debemos intentar solucionar estos asuntos; no hay que tirar la toalla"- y Pedrosa aceptó la invitación. "Iré a escuchar. Si veo que vale la pena, seguiré yendo", concedió el catalán antes de la reunión. ¿Ha valido la pena? "Ya lo veremos", contestó a la salida. No se habló de atropellos, ni de adelantamientos, ni de qué puede considerarse y qué no una maniobra correcta. Se habló básicamente de la celebración del GP de Japón, aplazado hasta el 2 de octubre pero que todavía está en el aire. "Ninguno de los pilotos de MotoGP queremos ir y eso es algo que Dorna ya sabe. Pero hoy no hemos llegado a ninguna conclusión. Todavía no se ha decidido nada", ha explicado Lorenzo.

Pedrosa, que ya advirtió ayer que si acciones como las de Simoncelli fueran debidamente sancionadas los pilotos más agresivos se lo pensarían dos veces antes de hacer una maniobra arriesgada, desea que dirección de carrera sea más clara con estas acciones, aunque no alberga demasiadas esperanzas en el cambio. "De acuerdo con la tolerancia de dirección de carrera da la impresión de que puede haber full contact en la pista, de que puedes tirarte encima de otro compañero, porque no pasará nada", ha indicado. Y ha mirado hacia la fórmula 1: "Aquí todo es muy gris, no hay un manual de buen comportamiento; en la fórmula 1 son mucho más estrictos y los pilotos saben qué se puede hacer y qué no, porque existen sanciones y se aplican".

Pedrosa y Simoncelli, durante la rueda de prensa de Mungello.MIRCO LAZZARI (GETTY IMAGES)

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