LIGA | LEVANTE 4 - BETIS 3

Épica 'granota'

El orgullo de los jugadores del Levante sirve para derrotar al Betis

Goles. Victoria. Permanencia. Vida. Los dos últimos clasificados se jugaban la vida ayer en el Ciutat de València. Pero la épica la pusieron especialmente los chicos de De Biasi. Los más necesitados. El Levante y el Betis brindaron un baile de goles. Cabía esperar un fútbol más aguerrido, quizá. Y menos espectáculo, pero lo hubo. Hubo también pelea. Muchos balones aéreos a ninguna parte. Y muchas asistencias erróneas. Sobre todo en el primer tiempo. Con la llegada del empate y, tras el descanso, el partido ganó en calidad. El equipo local recuperó la confianza, echó memoria y recordó que ya ha...

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Goles. Victoria. Permanencia. Vida. Los dos últimos clasificados se jugaban la vida ayer en el Ciutat de València. Pero la épica la pusieron especialmente los chicos de De Biasi. Los más necesitados. El Levante y el Betis brindaron un baile de goles. Cabía esperar un fútbol más aguerrido, quizá. Y menos espectáculo, pero lo hubo. Hubo también pelea. Muchos balones aéreos a ninguna parte. Y muchas asistencias erróneas. Sobre todo en el primer tiempo. Con la llegada del empate y, tras el descanso, el partido ganó en calidad. El equipo local recuperó la confianza, echó memoria y recordó que ya había sido capaz de hacerle tres goles a un rival directo, el Almería, tan sólo dos jornadas antes. Hasta ayer, ésa era su única victoria. Ahora sólo le separan cuatro puntos del Betis. Siguen siendo colistas, pero miran hoy la clasificación con una sonrisa de alivio.

El Levante llevó el peso del juego desde el inicio, aunque en los primeros 45 minutos el fútbol más correcto fue el del Betis, muy activo por las bandas. Los de Cúper creaban mucho peligro. Además, el gol que sumaron sólo a nueve minutos del inicio les permitió jugar a la espera de los errores levantinistas en busca de una contra rápida. En el Levante, los jugadores, que siguen sin cobrar, apelaban a su propio orgullo. Todos, aunque cada uno por su cuenta, querían arreglar el entuerto y buscaban el gol con individualidades. Hasta que, en una de ésas, el italiano Tommasi batió al meta bético tras haberse quedado casi sin ángulo. Un gol menos bello que complicado. Y, sobre todo, muy necesario. Solo dos minutos más tarde Riga, que había errado multitud de disparos, logró el empate. Arrancó la segunda parte y, de nuevo, el ghanés maravilló con un precioso gol desde fuera del área. Pero haría falta un cuarto tanto. El disparo cruzado del joven Javi Fuego a ocho minutos del final desató la locura entre la afición local, que, pese a todo, siguió pidiendo la marcha del máximo accionista, Pedro Villarroel.

Épico partido de los jugadores del LevanteVídeo: ELPAIS.com

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