Crónica:FÚTBOL

Puro espectáculo en Old Trafford

El Chelsea logra empatar un encuentro que se le puso muy cuesta arriba tras el gol inicial del Manchester

El Manchester United mantiene sus tres puntos de ventaja en la Premier League ante el Chelsea, tras brindar puro espectáculo en Old Trafford, donde hubo goles, buen fútbol, pasión y un tiempo para cada equipo.

Ganó con autoridad el United en el primer período. Recuperó su sitio el Chelsea en el segundo tramo. Hubo emoción, interés y aquel que pagó su entrada se fue feliz a su casa. El United puso más velocidad al partido en el primer tiempo. Cristiano Ronaldo apretó el acelerador y el primer cuarto de hora de Wayne Rooney fue frenético. Mordió a todo lo que se movía. Ayudó al costado iz...

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El Manchester United mantiene sus tres puntos de ventaja en la Premier League ante el Chelsea, tras brindar puro espectáculo en Old Trafford, donde hubo goles, buen fútbol, pasión y un tiempo para cada equipo.

Ganó con autoridad el United en el primer período. Recuperó su sitio el Chelsea en el segundo tramo. Hubo emoción, interés y aquel que pagó su entrada se fue feliz a su casa. El United puso más velocidad al partido en el primer tiempo. Cristiano Ronaldo apretó el acelerador y el primer cuarto de hora de Wayne Rooney fue frenético. Mordió a todo lo que se movía. Ayudó al costado izquierdo, eléctrico al ir a por Geremi y el United no dejó 'tocar bola' a Lampard ni tampoco a Drogba, a quien no llegaron balones claros.

Drogba se picó con Vidic, en un duelo interesante, especialmente en el juego aéreo. El mérito del United, que manda en la Liga inglesa, es haber recuperado a sus clásicos. Scholes, y sobre todo Giggs, han recuperado la autoestima y la forma física. Fue un duelo pasional, intenso, como todos los que juegan United y Chelsea, con un público entregado al espectáculo de la Liga más atractiva del mundo, tal y como definió recientemente Michel Platini.

El United sacó petróleo de su jugador más en forma. El francés Louis Saha hizo un gol hermoso. Con precisión de cirujano, controló al borde del área, amagó, y buscó el único hueco libre, pegado al palo, por donde entró raso el balón en el portal de Cudicini. Un golazo. Tras el decanso, el Chelsea cambió el libreto. Jugó más y mejor. De entrada porque José Mourinho modificó el mapa de su equipo. Dejó en el banquillo a Geremi. Tiró a Essien de lateral derecho, incrustó a Robben en el medio del campo.

Aparece Lampard, el Chelsea funciona

El Chelsea fue ya un rival más valiente. Comenzó a circular la pelota con criterio. Lampard apareció. Buscó el tiro de media distancia. Y avisaba del peligro a Van der Sar que hasta ese momento apareció inadvertido. En una acción a balón parado, en un córner, Ricardo Carvalho le ganó la partida a Heinze y empató el partido. Lo merecía el Chelsea con una reacción frenética en el segundo tiempo. El único que no apareció en el Chelsea fue Shevchenko. Mourinho leyó el partido de nuevo. Sacó a Joe Cole, retiró al ucraniano. Con el 1-1, el partido se abrió y se vieron momentos de gran fútbol, de ida y vuelta.

En la recta final, ambos clubes firmaron las tablas, con sus cambios tácticos. Se conformaron con un empate justo, de un buen partido. La Navidad marcará con el carrusel de partidos si el United consigue marcar su territorio en la tabla. Hoy, de momento, coincidieron en el campo juntos Lampard, Carrick, Rio Ferdinand y Joe Cole. La escuela del West Ham. Todos amigos y compañeros de infantiles. Un gusto para el espectador.