Los carteles de la Feria de San Isidro progresan adecuadamente (incluidas las recomendaciones)
La empresa madrileña presenta carteles más variados, aunque las ausencias siguen siendo notables y algunos toreros reciben un premio inmerecido
Adrián de Torres lidió dos corridas en Madrid en la pasada temporada: el 2 de abril cortó una oreja, y el 21 de mayo dio una vuelta al ruedo, y no figura en los carteles de San Isidro. David de Miranda hizo el paseíllo una tarde y también consiguió el premio de la vuelta, y su nombre tampoco aparece.
Otros toreros como Curro Díaz, Ángel Sánchez, El ...
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Adrián de Torres lidió dos corridas en Madrid en la pasada temporada: el 2 de abril cortó una oreja, y el 21 de mayo dio una vuelta al ruedo, y no figura en los carteles de San Isidro. David de Miranda hizo el paseíllo una tarde y también consiguió el premio de la vuelta, y su nombre tampoco aparece.
Otros toreros como Curro Díaz, Ángel Sánchez, El Cid, Joaquín Galdós, José Fernando Molina, Octavio Chacón, Ángel Sánchez, Paco Ramos o Rubén Pinar tuvieron una oportunidad y no pasó nada, y tampoco han sido contratados en esta feria.
Otros no pisaron en 2023 la arena de Las Ventas, pero cuya hoja de servicios les hace acreedores de esperanza, como Sánchez Vara, Esaú Fernández, Joselito Adame, Manuel Diosleguarde, Oliva Soto, Lama de Góngora, Daniel Crespo, Fortes, Sergio Serrano, José Ruiz Muñoz, Ángel Jiménez, Manuel Perera, entre otros, y, por lo visto, nadie los ha llamado.
Ni Alejandro Talavante, ni José María Manzanares ni Miguel Ángel Perera ni Cayetano merecen el buen trato recibido por Plaza 1
Nunca se conocerán los motivos reales de tales ausencias más allá de que la empresa no los ha considerado adecuados, pero todos ellos, y no son los únicos, han demostrado razones suficientes para estar en los carteles.
Por el contrario, Alejandro Talavante estuvo en 2023 cuatro tardes en Las Ventas, su actuación fue silenciada en seis toros y saludó en los dos restantes y ha sido contratado otras cuatro tardes en San Isidro. Casos similares son los de José María Manzanares y Miguel Ángel Perera, con dos tardes vacías cada uno en 2023 y vuelven con el mismo premio. Y está el caso clamoroso de Cayetano, que no acude a Madrid desde la temporada de 2018, y no ha hecho méritos para volver, y ahí está, con dos tardes de lujo en el abono ferial.
Se supone que todos ellos cuentan con un buen padrino (el más afortunado, Talavante, cuyo apoderado es Simón Casas, uno de los empresarios de la plaza; a Manzanares lo representa Matilla, el que más manda en el toreo, y Cayetano tiene a su lado a Curro Vázquez, que siempre lo ha cuidado con extremoso cariño), y que Plaza 1 considera que son un buen reclamo para las taquillas, lo cual no evita pensar que ninguno de ellos se ha hecho acreedor de tales contrataciones.
Claro que nada ni nadie es perfecto, como es el caso de Plaza 1, empresa de Las Ventas, que busca una legítima rentabilidad y tiene sus compromisos (no es lo mismo que te apodere el señor Casas que un desconocido aficionado); de ahí, que, un año más, los carteles de San Isidro contengan flagrantes injusticias tan inherentes a la historia del toreo.
He ahí el caso de Fernando Adrián, (dos salidas a hombros el año pasado), que a punto ha estado de quedarse en su casa por cuestiones de dinero; al final, y parece que por indicación del Centro de Asuntos Taurinos —el órgano de la Comunidad de Madrid con mando en Las Ventas— ha sido contratado para la corrida de Beneficencia y otra en la Feria de Otoño.
Dicho lo cual, —el que tiene padrino se bautiza, y no se señala por Adrián, que es el único que de verdad merece estar en la feria—, se debe reconocer que el cartel de 2024 es más abierto, cuenta con ilusionantes caras jóvenes, recupera nombres olvidados sin motivo en 2023 y ofrece, en suma, más diversidad en las combinaciones.
Pablo Hermoso de Mendoza también rehúye la competencia con Diego Ventura en la corrida de su despedida de Madrid
Ahí están, por ejemplo, García Pulido, Álvaro Alarcón, Alejandro Fermín, David Galván, Jorge Martínez, Ángel Téllez, Cristian Parejo, Víctor Hernández e Isaac Fonseca, y nombres que nunca debieron faltar como Manuel Escribano, Antonio Ferrera o Rafaelillo. Vuelve Juan Ortega, acompañado por Pablo Aguado y Diego Urdiales, tres artistas intermitentes pero siempre bienvenidos. Y están Morante, imprescindible; Ureña, un grande casi siempre maltratado; y Borja Jiménez, Emilio de Justo, Castella, Roca Rey, Luque y Ginés Marín, con todo merecimiento.
Dos tardes estará también el rejoneador Diego Ventura, que una vez más no podrá competir con Hermoso de Mendoza, que acude para despedirse en compañía de su hijo y Lea Vicens.
Y una buena noticia en el apartado ganadero: se lidiarán toros de Miura, Baltasar Ibán, José Escolar, Victorino, Adolfo Martín y Pedraza de Yeltes, que no garantizan la emoción, pero provocan la ilusión, que no es poco. Las demás ganaderías son las de siempre, las que suelen criar toros para el disfrute del torero.
Tres novilladas cierran el ciclo isidril con nueve chavales que vienen a Madrid a jugarse su futuro con muy escaso bagaje la mayoría de ellos.
En suma, mejores carteles los de San Isidro de 2024, más variedad de toros y toreros, con lamentables ausencias y la convicción de que algunos reciben un premio inmerecido.
Y un apunte final: un año más, la gala de presentación de la feria sustituyó a la rueda de prensa en la que los empresarios debieran someterse a las preguntas, a veces incómodas, de los medios de comunicación. La falta de transparencia que no falte en el sector taurino.
García Garrido: “San Isidro es un ferión”
“San Isidro es un ferión”. Así calificó los carteles Rafael García Garrido, empresario de Las Ventas, en el curso de la gala celebrada anoche en el ruedo de la plaza, a la que asistieron algo más de 500 personas, y en la que estuvieron la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida.
Cincuenta jóvenes modelos abrieron el espectáculo vestidas con trajes goyescos, trajes cortos y de rejoneo, todos con alusiones taurinas, obra del sastre Justo Algaba.
A continuación, Elena Salamanca y Ramón García, los presentadores del acto, desvelaron la única sorpresa de la noche porque los carteles ya se conocían: Cayetana Rivera, hija de Francisco Rivera Ordóñez y Eugenia Martínez de Irujo, será la imagen del cartel de este año que acompañará el anuncio de todos los festejos de la temporada, obra del artista Juan Iranzo. La protagonista recibió el premio Juventud y Tauromaquia, que le entregó Victoria Federica de Marichalar. Otros premiados por la empresa Plaza 1 fueron el diestro Borja Jiménez, el ganadero Victorino Martín, el doctor Máximo García Padrós, cirujano jefe de la plaza, y el periodista Pedro Piqueras.
Simón Casas, el otro empresario, dijo que “en la feria no falta ningún torero, están todos”, y añadió que nunca había sentido tanto apoyo a la fiesta como el que le ofrece la Comunidad de Madrid.
García Garrido, por su parte, felicitó públicamente al mayoral Florito, el hombre que elige las ganaderías, y aseguró que en Madrid (“que cuenta con un público duro y exigente”) no hay vetos entre los toreros.
Y cerró el acto la presidenta Díaz Ayuso con un largo discurso plagado de citas sobre el taurinismo de Madrid (“el centro mundial del toreo”), admitió la supuesta dificultad en la confección de los carteles, que los comparó con las listas electorales o las de una boda, y se refirió a la reciente prohibición de los toros en México: “No conozco”, dijo, “un lugar donde se haya abierto un camino de libertad y prosperidad cuando se ha cerrado una plaza de toros”.