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Dos Passos

El documental 'Robles, duelo al sol' permite comprobar la capacidad narrativa y analítica del cine cuando se realiza con rigor

Imagen del documental 'Robles, duelo al sol'.

El documental Robles, duelo al sol, que La 2 emitió el pasado viernes, permite comprobar la capacidad narrativa y analítica del cine cuando se realiza con rigor. Si, como dijo Celaya, “la poesía es un arma cargada de futuro”, el cine puede ser, y en este caso lo es, un arma cargada de presente que clarifica el pasado.

José Robles fue un intelectual formado en la Institución Libre de Enseñanza, políglota y republicano, que conoció a John Dos Passos en uno de los viajes que el escritor realizó por España. Comenzó una amistad que se consolidaría con los años. Robles fue el traduct...

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El documental Robles, duelo al sol, que La 2 emitió el pasado viernes, permite comprobar la capacidad narrativa y analítica del cine cuando se realiza con rigor. Si, como dijo Celaya, “la poesía es un arma cargada de futuro”, el cine puede ser, y en este caso lo es, un arma cargada de presente que clarifica el pasado.

José Robles fue un intelectual formado en la Institución Libre de Enseñanza, políglota y republicano, que conoció a John Dos Passos en uno de los viajes que el escritor realizó por España. Comenzó una amistad que se consolidaría con los años. Robles fue el traductor de la novela más importante de su amigo, Manhattan Transfer, texto innovador y difícil que necesitaba de un traductor culto y dominador del oficio.

Los 85 minutos del documental de Sonia Tercero tienen dos pilares básicos: la colaboración de familiares, historiadores y escritores que comentan la inexplicada desaparición de José Robles y una utilización excelente de un gran material de archivo, y es de esa conjunción de presente y pasado de la que se desprenden varias conclusiones: en primer lugar, la insobornable personalidad de Dos Passos, dispuesto a desentrañar el misterio de la desaparición de su amigo, a quien, en diciembre de 1936 en Valencia, donde trabajaba como intérprete de la Embajada soviética, se lo llevaron unos desconocidos y nunca más se supo de él. Ahí acabó la vida de un intelectual español que residía en Baltimore, que era profesor de la Johns Hopkins University y que optó por quedarse en España al servicio de la República tras el levantamiento golpista del general Franco.

También se puede comprobar el submundo de los servicios secretos soviéticos, a los que se atribuye el asesinato de Robles, en sus turbios manejos con el Gobierno republicano. Eran tiempos inmisericordes, algo que Hemingway nunca comprendió y que le valió el que Dos Passos finalizara su amistad con él.