Contar la verdad en tiempos de bulos
El escritor Javier Cercas apadrina a la 35ª promoción de la Escuela de Periodismo UAM - EL PAÍS en su graduación
Contar la verdad. Ese es el encargo que el escritor Javier Cercas hizo este jueves a los alumnos de la 35ª promoción de la Escuela de Periodismo UAM – EL PAÍS. El también columnista del diario ejerció de padrino de los recién titulados, que recogieron sus diplomas en un acto celebrado en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) que también contó con la participación del director de la Escuela, Javier Moreno; la vicerrectora de Estudios de Posgrado de la UAM, Isabel Alonso; el vicerrector de Estudios de Grado de la UAM, Santiago Palacios; la directora de EL PAÍS, Pepa Bueno; y el presidente de Prisa, Joseph Oughourlian.
“Hoy el periodismo es más necesario que nunca. Por infinidad de motivos, pero mencionaría uno en concreto: la mentira tiene más capacidad de difusión que nunca”, expuso Cercas a los alumnos, que estuvieron arropados por sus familiares y las dos promociones de alumnos que los han sucedido en el máster. El autor de El impostor o Anatomía de un instante reconoció que la tarea de buscar la verdad en medio de tanto bulo no es menor, pero los animó a asumir esa responsabilidad. “Y no basta con decir la verdad, hay que desmontar las mentiras”.
Cercas advirtió a los recién graduados que “a menudo la gente prefiere la mentira”, por ser menos amarga e incómoda, pero defendió que el periodismo debe aspirar a cumplir con el ideal de la verdad histórica. Los invitó a estar alerta, a salir, preguntar, estudiar y reflexionar sobre hechos, protagonistas y sobre el mismo lenguaje.
El escritor hizo estas declaraciones durante la conversación que mantuvo con el director de la Escuela, quien previamente recordó a los ya exalumnos que el descrédito hacia el oficio se ha instalado entre los ciudadanos. “Hemos dejado pasar décadas en las que se han acumulado desafueros y desatinos”, reconoció Moreno en referencia al conjunto de los profesionales. Y, a continuación, añadió mirando a los graduados: “Es a ustedes a quién le va a tocar arreglarlo”. El director les previno de los intereses y presiones que sufrirán desde todos los flancos y les ofreció algunos consejos, como nunca firmar aquello que intranquilice su conciencia o no publicar una noticia que no puedan defender de principio a fin.
El periodista agradeció el apoyo de la Universidad Autónoma en esta maestría, así como el de la entidad CaixaBank, por ofrecer becas a los alumnos; y a Prisa, empresa editora de EL PAÍS. El presidente del grupo destacó en su intervención que a partir de este momento el trabajo de los 34 periodistas que han formado parte de esta promoción dejará una impronta en la sociedad y democracias de sus respectivos países.
Tal y como describió la vicerrectora, los alumnos cierran “una etapa de profundo aprendizaje y mucho esfuerzo”. Tras un año de intensa formación, llegó otro de prácticas. En esa segunda etapa es cuando Javier Liébana, uno de los graduados, empezó a sentirse realmente periodista. “No te das cuenta de lo que es la profesión hasta ese momento y nada de lo que has visto o pensando se equipara a lo que realmente es”, explica. Liébana se ha incorporado ya ha su nuevo puesto de trabajo en la cadena SER, y asegura que ahora entiende “eso que te contaban y que no llegabas a comprender del todo, ese clic” que te muestra dónde está la noticia.
El acto de graduación concluyó con la interpretación, por parte del coro de la UAM, del Gaudeamus Igitur.