Los anticapitalistas revisarán después de Reyes sus pactos dentro de Podemos
La tercera corriente más importante del partido abordará en una asamblea la ruptura formal del acuerdo suscrito hace más de un año con Espinar
Los anticapitalistas revisarán en una asamblea la semana después de Reyes la alianza que el último año ha decidido los equilibrios internos de Podemos en la Comunidad de Madrid en favor de los partidarios de Pablo Iglesias. La corriente que lidera Miguel Urbán da por concluido el pacto suscrito con el secretario general autonómico, Ramón Espinar, tras los recientes cambios aprobados en la ejecutiva regional, en los que perdieron tres de las cuatro carteras que tenían.
La tercera familia con ma...
Los anticapitalistas revisarán en una asamblea la semana después de Reyes la alianza que el último año ha decidido los equilibrios internos de Podemos en la Comunidad de Madrid en favor de los partidarios de Pablo Iglesias. La corriente que lidera Miguel Urbán da por concluido el pacto suscrito con el secretario general autonómico, Ramón Espinar, tras los recientes cambios aprobados en la ejecutiva regional, en los que perdieron tres de las cuatro carteras que tenían.
La tercera familia con mayor representación dentro de Podemos decidirá dentro de dos semanas sobre la ruptura formal con Espinar tras el “ostracismo” que atribuye a la pérdida de las secretarías de Política, Acción Institucional y Comunicación en el consejo de coordinación o dirección autonómica de Podemos, donde solo mantiene la cartera de Feminismo.
Un reparto de funciones que favorece a Espinar y que los anticapitalistas consideran desequilibrado —mantienen a uno de la docena de miembros de la ejecutiva, en la que se estrenan los errejonistas, representados por la nueva presidenta del grupo parlamentario en la Asamblea, Mónica García, con voz pero sin voto— tras obtener un tercio de los votos en las primarias a la dirección en la ciudad de Madrid, en las que la candidatura de Julio Rodríguez, apoyada por Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, se impuso a la de Isabel Serra. “Somos leales con el proyecto, pero no obedientes con la dirección”, advierten referentes de los anticapitalistas, que vinculan lo que denominan “purga” a la futura composición de las listas municipales y autonómicas para las elecciones de 2019. Desde la dirección de Espinar se transmite que ahora se representa “a todas las sensibilidades” de Podemos.
La nueva configuración del consejo de coordinación fue aprobada por 19 votos a favor frente a los 10 en contra de los representantes del errejonismo y anticapitalistas. También hubo una abstención. Los cambios en la dirección del grupo parlamentario —donde errejonistas y anticapitalistas son mayoritarios frente a los fieles a Iglesias— obtuvieron 26 votos a favor y tres en contra, más otra abstención. La elección de García se engloba en los acuerdos de pablistas y errejonistas en Madrid, que tienen su máxima expresión en el respaldo conjunto a Rodríguez para relevar a Jesús Montero como secretario general en la capital.
Candidaturas unitarias
Otro potencial punto de fricción serían las relaciones con otras formaciones de izquierda en los municipios de la región. “Uno de los núcleos centrales del acuerdo de hace un año era que íbamos a apostar por candidaturas unitarias en los procesos municipales con IU y otras fuerzas”, recalcan desde Anticapitalistas. Esta corriente aglutinaría, según sus cálculos, a alrededor del 15% de los más de 70 secretarios generales locales con que cuenta Podemos en la región. Leganés, San Sebastián de los Reyes y Rivas serían de dominio anticapitalista.
La fractura con los anticapitalistas se produce en un contexto en el que Espinar ya no les necesitaría para mantener el control de los órganos de gobierno de Podemos Comunidad de Madrid. Los ocho representantes de los círculos elegidos de manera presencial por las bases para el Consejo Ciudadano Autonómico —que antes de su entrada contaba con 34 integrantes— estarían en sintonía con el secretario general, dejando en minoría a la docena de anticapitalistas y media docena de partidarios a Errejón. En este nuevo escenario, los anticapitalistas ya no son determinantes.