La gigante minera BHP es condenada en el Reino Unido por el desastre ambiental más grave de Brasil
El Tribunal Superior de Londres afirma que la empresa ignoró los avisos sobre los riesgos de una represa que colapsó en Mariana, mató a 19 personas y contaminó un río
La justicia del Reino Unido emitió este viernes su veredicto sobre la mayor catástrofe ambiental de la historia reciente de Brasil, condenando a la gigante minera angloaustraliana BHP por el colapso de la represa de Fundão, en el municipio de Mariana, en Minas Gerais, ocurrido en 2015. La decisión acaba con la amarga espera de más de 620.000 demandantes y establece un precedente inédito para que las víctimas brasileñas puedan buscar reparaciones en tribunales extranjeros. El colapso causó el vertido de más de 40 millones de metros cúbicos de desechos mineros, destruyó comunidades enteras, causó 19 muertos y más de 600 desalojados, y contaminando la cuenca del río Doce hasta el océano Atlántico.
El Tribunal Superior de Londres considera que BHP ejerció control directo e indirecto sobre Samarco, la empresa subsidiaria responsable por operar la represa, e ignoró advertencias técnicas que evidenciaban riesgos estructurales años antes de su desplome. La compañía anunció su intención de recurrir la condena.
Con esta sentencia, se cierra la primera fase del juicio y se abre un proceso para definir las compensaciones a los afectados por la conocida como catástrofe de Mariana, quienes vivían a lo largo del curso del Río Doce. El bufete británico Pogust Goodhead, que representó a los afectados por la catástrofe, estima que las indemnizaciones podrían llegar a los 36.000 millones de libras (unos 47.000 millones de euros).
“Nosotros hemos tenido que luchar contra algunas de las mayores empresas mineras del mundo para defender nuestros derechos. Ha sido muy difícil, ha pasado una década de lucha, pero quienes fuimos afectados no nos rendimos”, explica en entrevista el líder indígena Marcelo Krenak, que representa comunidades afectadas de la región de Vale do Rio Doce. “Ellos [los empresarios mineros] nos quitaron toda nuestra riqueza y lo que nos sobró fueron sus desechos. Esta victoria demuestra que cuando alguien está dispuesto a luchar, puede haber justicia”, afirma.
A lo largo de los últimos diez años, en Brasil se firmaron distintos acuerdos de reparación entre las empresas mineras BHP y la brasileña Vale (también copropietaria de Samarco) y entes públicos federales. Sin embargo, millares de víctimas de la tragedia escogieron adherirse al juicio británico insatisfechas con la forma en la que el Estado brasileño responsabilizó a las empresas. En noviembre del año pasado, Vale y BHP fueron absueltas penalmente en un tribunal brasileño por falta de pruebas sobre su responsabilidad en la rotura de la presa, una decisión que causó amplio malestar entre las organizaciones defensoras de víctimas de la tragedia.
La acción colectiva presentada en Londres abrió camino para la búsqueda de justicia y se convirtió en el mayor juicio ambiental del mundo.
En 2019, el colapso de otra represa minera de la multinacional Vale en la misma región de Brasil, en Brumadinho, estado de Minas Gerais, mató a 270 personas, sepultadas bajo el lodo de los residuos.
Para los representantes de las víctimas de la tragedia de Mariana, el resultado del litigio cambia el rumbo de la lucha ambiental en el país sudamericano. Thatiele Monic Estevão, activista y representante de comunidades quilombolas de Mariana, comentaba, tras conocer la sentencia mientras participaba de la COP30 en Belém, la gran mezcla de emociones que sintió. “Fue muy simbólico para nosotros, porque no podemos hablar de justicia climática sin que las personas que están entrando en nuestros territorios, causando devastación, sean responsabilizadas por los delitos que están cometiendo dentro de nuestros territorios”, afirma.
“Esta es una victoria de todos los pueblos y comunidades tradicionales que se encuentran a lo largo de la cuenca del río Doce”, dice Estevão, “y refuerza que los pueblos y las comunidades tradicionales siempre estarán involucrados en la lucha, e incluso nos sumaremos a la lucha contra las grandes empresas mineras para defender nuestros territorios”.
En su decisión de este viernes, el tribunal concluyó que BHP fue partícipe de decisiones estratégicas de Samarco, incluyendo la ampliación de la producción sin garantías suficientes de seguridad. Además, la sentencia indica que la gigante minera tuvo acceso a reportes que identificaban la inestabilidad en la zona que dio inicio a la ruptura y que, a pesar de ello, permitió la continuidad de la operación.
Por su parte, la defensa de BHP alegó que el proceso penal de Londres solamente duplicaba mecanismos existentes en Brasil y que muchas víctimas (más de 600.000) ya habían sido compensadas; argumentos rechazados por el tribunal por la incapacidad de demostrar que los acuerdos brasileños podrían sustituir automáticamente el derecho de litigar en Reino Unido.
La corte confirmó, bajo efecto inmediato, que los más de 620.000 demandantes entraron en el proceso dentro del plazo legal, por lo que pueden continuar con la demanda, y también rechazó la alegación de prescripción del caso, lo que puede abrirles las puertas a nuevos demandantes hasta 2029. Los costos futuros de las indemnizaciones serán asumidos también por Vale, que aunque no es parte del litigio de Londres, tiene un acuerdo con BHP para compartir eventuales costos resultantes de decisiones en otras jurisdicciones.
“Esta ha sido una gran victoria para nosotros”, dice Felipe Hotta, dueño del bufete brasileño Hotta Advocacia, que colabora con Pogust Goodhead en Brasil y gestiona la relación con los demandantes. Según él, el próximo estadio del proceso será la calificación de daños para definir el valor que tendrá que ser pagado a cada individuo y comunidad afectados. “ Contamos con un gran equipo de abogados aquí en Brasil que recopilan todos los datos, las pruebas y los cuestionarios de cada uno de los clientes para individualizar los daños sufridos por cada uno de ellos”, explica Hotta.
El juicio sobre los daños ocurrirá solamente en 2026 y podría extenderse durante más de seis meses. La decisión final sobre estas indemnizaciones puede ocurrir entre 2028 y 2029.