La telaraña que mantiene preso en Guatemala al periodista José Rubén Zamora en medio de denuncias sobre su situación
La ONU ha pedido este miércoles a las autoridades del país que aborden “urgentemente” las denuncias sobre las condiciones “inhumanas” en las que se encuentra recluido desde hace dos años el fundador de ‘elPeriódico’
Expertos independientes de Naciones Unidas (ONU) pidieron este miércoles a las autoridades de Guatemala que aborden “urgentemente” las denuncias sobre las condiciones “inhumanas” en las que se encuentra recluido desde hace más de dos años el periodista guatemalteco ...
Expertos independientes de Naciones Unidas (ONU) pidieron este miércoles a las autoridades de Guatemala que aborden “urgentemente” las denuncias sobre las condiciones “inhumanas” en las que se encuentra recluido desde hace más de dos años el periodista guatemalteco José Rubén Zamora, que, según dijo esa organización en un comunicado, equivalen a tortura y ponen en riesgo su vida.
Zamora es un destacado periodista crítico del poder, que fundó y dirigió por más de 20 años el desaparecido diario elPeriódico. Fue arrestado a finales de julio de 2022, durante el Gobierno e Alejandro Giammattei, y acusado inicialmente de lavado de dinero y meses después de obstrucción a la justicia, unos cargos por los que no tiene condena. “Según informes, el Sr. Zamora ha sido sometido a casi veinte meses de confinamiento solitario en una oscuridad casi constante. Este trato equivaldría a tortura”, señala el comunicado.
Este se ha hecho público en la misma semana en la que un tribunal le otorgó al periodista arresto domiciliario por el caso de lavado de dinero por el que se le acusa. Es la segunda vez que esto sucede, pero en ambos casos, Zamora no ha podido salir de prisión por tener otro cargo en su contra. El periodista parece así atrapado por una telaraña judicial en medio de los casos que le abrieron sus acusadores, el Ministerio Público y la Fundación contra el Terrorismo (FCT), una organización de extrema derecha que actúa como querellante en el caso.
Tanto la cúpula de la Fiscalía, liderada por la jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras, como la dirección de la de la FCT, encabezada por Ricardo Méndez Ruiz, han sido sancionados por Estados Unidos bajo señalamientos de socavar la Justicia en Guatemala. “Arbitrariamente estoy preso, pero me siento libre. Mi espíritu está libre. Me hace falta mi familia, pero me siento en absoluta libertad”, declaró el periodista de 68 años a los medios al salir de la audiencia el pasado lunes.
Pese a que en sus salidas de prisión para comparecer ante los tribunales, el fundador de elPeriódico suele mostrarse fuerte y con la dignidad en alto, los organismos internacionales han alzado la voz por sus condiciones en prisión, principalmente durante el Gobierno de Alejandro Giammattei. “Habría soportado diferentes formas de trato inhumano o degradante, como la privación del sueño, la desnudez forzada, registros arbitrarios de la celda, y la falta de respuesta a una infestación de ácaros en su celda”, indica el informe de la ONU.
Zamora está recluido en la cárcel Mariscal Zavala ubicada adentro de una base militar en Ciudad de Guatemala. Desde su encarcelamiento, el periodista se ha declarado un “preso político”. Los expertos de la ONU también han manifestado su preocupación porque Zamora no haya recibido tratamiento médico adecuado para su deterioro físico y mental. “Las condiciones denunciadas que ha experimentado el señor Zamora violarían la prohibición absoluta de la tortura y/u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes”, señalaron los expertos.
Atrapado y sin salida
Mientras, el periodista sigue enfrentándose al laberinto judicial. La audiencia de etapa intermedia en el segundo caso en contra de José Rubén por obstrucción a la justicia y falsificación de documentos en forma continuada ha estado entorpecida desde hace un año por ausencia de los querellantes adhesivos, del fiscal o del juez.
El fiscal a cargo del caso es Rafael Curruchiche, quien también fue incluido en la lista Engel de actores corruptos del Departamento de Estado de Estados Unidos y quien además ha sido sancionado por más de 40 países por sus acciones “antidemocráticas”.
A principios de agosto, Zamora fue declarado “preso de conciencia” por Amnistía Internacional. Mientras que la ONU mantiene a Guatemala bajo vigilancia y fiscalización por otras dos detenciones que consideran arbitrarias.
El presidente Bernardo Arévalo, que tomó el poder en el país centroamericano a principios de año prometiendo “cerrar el capítulo de la corrupción brutal”, ha calificado el caso de Zamora de “persecución política a la prensa”. Nada más tomar el poder, el mandatario mejoró las condiciones en prisión del periodista. Sin embargo, su familia lamenta que el mandatario ha hecho poco por garantizar la libertad de Zamora pese a los pedidos internacionales.
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