Profundo y hermoso molinillo de Dúbov
El ruso, muy creativo, realiza un brillante sacrificio de dama para ejecutar un patrón combinatorio típico, pero con una elegante añadidura
Daníil Dúbov (Moscú, 1996) es un autor muy adecuado para una obra inmortal, como la que glosa este vídeo. Quizá su espíritu sea demasiado inquieto -le interesan muchos asuntos totalmente ajenos al ajedrez; sigue viviendo en Rusia tras mostrarse varias veces públicamente en contra de la agresión a Ucrania- para ser campeón del mundo, pero sin duda posee uno de los mayores talentos producidos en los últimos tres decenios. Además, su valentía y creatividad están muy por encima de la media entre los jugadores de élite.
Lo que hace en este caso es enriquecer un patrón bien conocido -el del molinillo- con gran brillantez (sacrificando su dama) y profundidad, de modo que cuando la combinación parece haber terminado sin victoria, aparece el verdadero elemento ganador, muy elegante.