Análisis

Qué dicen las encuestas de Asturias

El PSOE es un favorito claro

El socialista Adrián Barbón es el favorito para presidir Asturias. El PSOE ha gobernado el principado desde 1999, con un paréntesis de menos de un año, entre julio de 2011 y mayo de 2012, cuando lo hizo Foro Asturias, el partido de Francisco Álvarez Cascos, que ganó la presidencia pero no encontró apoyos para gobernar y acabó convocando elecciones anticipadas. Javier Fernández se impuso en esa votación y fue elegido presidente, un puesto que revalidó en 2015.

Ahora todas las encuestas colocan al PSOE como favorito. Los socialistas aparecen siempre como primera fuerza. Su suma con Podemo...

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El socialista Adrián Barbón es el favorito para presidir Asturias. El PSOE ha gobernado el principado desde 1999, con un paréntesis de menos de un año, entre julio de 2011 y mayo de 2012, cuando lo hizo Foro Asturias, el partido de Francisco Álvarez Cascos, que ganó la presidencia pero no encontró apoyos para gobernar y acabó convocando elecciones anticipadas. Javier Fernández se impuso en esa votación y fue elegido presidente, un puesto que revalidó en 2015.

Ahora todas las encuestas colocan al PSOE como favorito. Los socialistas aparecen siempre como primera fuerza. Su suma con Podemos e IU supera el 50% de votos y obtiene entre 24 y 27 escaños. La mayoría está fijada en 23, así que esas cifras garantizan que un acuerdo de la izquierda superaría a un candidato que contase con el apoyo de PP, Ciudadanos, FAC y Vox.

Además, al contrario de lo que pasa en muchas otras autonomías, en Asturias la suma de PSOE, Podemos e IU ya obtuvo más votos que PP, Ciudadanos y Vox en las generales.

Al PSOE también le ayuda el mecanismo de investidura en Asturias, que es diferente al del resto de comunidades. El proceso habitual es que un único candidato se presente a la investidura y que todos los diputados se pronuncien a favor, en contra o con una abstención. Hay una primera votación que exige mayoría absoluta y una segunda donde basta con tener más votos afirmativos que negativos. Ese sistema hace que, en esencia, un candidato necesite el apoyo implicito de la mayoría de la cámara (si una mayoría vota explícitamente en su contra, no es elegido).

Pero en Asturias pueden presentarse varios candidatos a la investidura, no hay voto en contra y para ser elegido basta con ser el aspirante con más votos a favor en la segunda votación. Solo en caso de empate es posible que se repitan las elecciones. Este procedimiento da ventaja al PSOE porque le bastaría con sumar más apoyos que un candidato alternativo, si lo hay.

En 2015 el proceso requirió tres votaciones. En la primera, ninguno de los candidatos logró una mayoría absoluta. En la segunda se produjo un empate entre el socialistas Javier Fernández, que obtuvo los 14 votos de su partido, y la popular Mercedes Fernández, que sumó los votos del PP y de Foro Asturias. Para deshacer el empate se celebró una tercera votación, donde los votos de IU en favor de Javier Fernández le dieron la presidencia al PSOE.

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Fe de errores. En la primera versión del texto se decía que Javier Fernández era el candidato socialista en lugar de Adrián Barbón.

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