Castilla-La Mancha y Madrid rebajan la alerta por el incendio de neumáticos

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha reducido a la diez de la mañana a nivel 1 el incendio del vertedero de neumáticos que desde la madrugada del viernes arrasa esta superficie de 11 hectáreas, situado entre Seseña (Toledo) y Valdemoro (Madrid). Por su parte, la Comunidad de Madrid ha rebajado a mediodía a nivel cero la peligrosidad del siniestro y, a las tres de la tarde, ha levantado el puesto de mando que tenía en la zona. La nube de humo es mucho menos densa que en días anteriores y ya tiene un colo...

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha reducido a la diez de la mañana a nivel 1 el incendio del vertedero de neumáticos que desde la madrugada del viernes arrasa esta superficie de 11 hectáreas, situado entre Seseña (Toledo) y Valdemoro (Madrid). Por su parte, la Comunidad de Madrid ha rebajado a mediodía a nivel cero la peligrosidad del siniestro y, a las tres de la tarde, ha levantado el puesto de mando que tenía en la zona. La nube de humo es mucho menos densa que en días anteriores y ya tiene un color más grisáceo, lo que demuestra que hay menos carga combustible en la zona.

El suboficial del Consorcio de Bomberos de Toledo, Joaquín Pérez, ha explicado que se ha reducido considerablemente el incendio durante la noche y que ahora mismo se va a empezar a trabajar con maquinaria pesada para ampliar los cortafuegos y evitar que el fuego llegue a las tres hectáreas que quedaron sin quemar. “La carga térmica se ha reducido bastante y ahora vamos a trabajar con vehículos desde el suelo porque no consiste solo en echar agua. Este tipo de combustible [las ruedas] no reaccionan al agua, sino que es necesario trabajar con espumógeno para reducir la densidad y el volumen de las llamas”, ha destacado Pérez.

En la esquina del cementerio

Los trabajos de extinción se van a centrar en la esquina superior del cementerio, en el término municipal de Valdemoro. Allí es donde, supuestamente, se originó. El viento, que ha reducido su velocidad de los 20 kilómetros por hora de ayer a los 12 kilómetros de hoy, está favoreciendo esas labores de extinción. “Tenemos que aprovechar que tiene dirección oeste hasta el mediodía para intentar apagar esa zona y que las llamas no corran más y salten los cortafuegos”, ha destacado el suboficial de bomberos.

El inspector jefe de guardia de los bomberos de Madrid, Luis Villarroel, ha explicado que se están haciendo los trabajos “con la habilidad de un cirujano” para no tener que echar más agua que contamine el subsuelo y los acuíferos y para lograr que el fuego no se propague. “Estamos siendo lo más conservadores posibles porque nuestro objetivo es reducir el nivel de humo para que no afecte a la urbanización cercana, bajar la temperatura de los neumáticos y no excederse con el agua para no afectar al terreno”, ha explicado Villarroel. Éste ha destacado que la consistencia del humo es hoy mucho menor que ayer. “Tan importante como la calidad del aire son los acuíferos y todo el subsuelo que hay debajo”, ha recordado el mando.

Pequeños volcanes dentro del vertedero

El jefe de los bomberos ha descrito que se han encontrado como pequeños volcanes dentro del vertedero, formados por las ruedas en los que solo la parte más alta está con llamas. Por eso, los bomberos están echando agua muy difuminada para no provocar más humo ni avivar el incendio en ese punto. “El fuego está ahora confinado, pero llevará muchos días darlo por extinguido. Eso sí, gracias a la noche ha bajado mucho la carga de fuego y se ha despejado bastante la columna de humo.

Hoy está previsto que no trabajen los helicópteros que descargan agua ni los hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente. Tan solo hay una aeronave de la Comunidad de Madrid que sobrevuela la zona para mandar imágenes en directo a los centros de coordinación de emergencia situados en sendos camiones en un área de servicio de la autopista radial de peaje R-4.

Los 20 bomberos del Consorcio de Toledo y de la Comunidad de Madrid están trabajando a pie de obra en el esquinazo superior del cementerio, justo al inicio de la ladera. “La extinción total del fuego llevará bastantes días porque hay muchas ruedas”, ha destacado el responsable de bomberos.

Sin problemas por contaminantes para las personas

El consejero de Hacienda y de Administraciones Públicas de la Junta de Castilla-La Mancha, Alfonso Ruiz Molina, ha explicado que la nube de humo ha alcanzado “una gran verticalidad” y unos 700 metros de altura, lo que supone que hace que no afecte a la población de las urbanizaciones colindantes. Las autoridades están vigilantes de cualquier cambio que pueda ocurrir durante la noche.

Las mediciones que actualmente tiene la Junta han descartado que existan problemas por contaminantes para estas personas. “Los primeros resultados son normales y en breve tendremos un medidor en el colegio que hay en la propia urbanización El Quiñón [la del Pocero]. Los datos que nos ha facilitado la Comunidad de Madrid son normales. Algunos tendrán que ser analizados en los próximos días con un estudio más pormenorizado”, ha añadido Ruiz Molina.

El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, ha visitado la zona y ha explicado que ya han podido regresar a sus viviendas las 58 personas que habían pernoctado en los polideportivos de Seseña. Ha recordado que, al bajar el incendio al nivel 1, ya no actuarán los hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente, pero que estarán a disposición de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en caso de que sea necesario. También ha destacado que se ha colocado un medidor de índices de contaminación medioambiental en un colegio de la urbanización del Pocero para ver si hay riesgo para la población que vive allí.

Gregorio ha agradecido la labor de la Guardia Civil, que participó ayer en el desalojo de la urbanización y que ha estado toda la noche vigilando la zona para evitar que se cometieran robos ante la ausencia de los propietarios de las viviendas. El instituto armado ha iniciado desde ayer la investigación de lo ocurrido para determinar si se ha producido de manera intencionada, lo más probable, o se debe a un hecho fortuito. “El incendio es muy, muy reciente y es muy pronto para saber a qué se debió. Están investigando y las pesquisas pueden llevar meses”, ha afirmado el Delegado del Gobierno.

Alerta desde una gasolinera

El incendio comenzó a la una y media de la madrugada del viernes en un lateral del cementerio. Fue la empleada de una gasolinera situada en un área de servicio de la R-4 la que avisó al teléfono de emergencia 112. El fuego se propagó con gran rapidez debido a los cinco millones de neumáticos almacenados. Las ruedas es un material altamente inflamable, que puede alcanzar unas temperaturas de entre 800 y 1.000 grados. Además, las pilas de residuos llegaban hasta los cinco metros, lo que se tradujo en llamas de hasta 60 metros.

El alcalde de Seseña, Carlos Velázquez (PP), que ha acompañado al delegado durante su visita, ha pedido que se conozcan cuanto antes los análisis medioambientales que está haciendo la Junta de Castilla-La Mancha. Tampoco ha querido entrar en estos momentos en qué ha pasado para durante 16 años estuvieran toneladas y toneladas de neumáticos en un lugar que supuestamente se iba a destinar a su reciclaje. “Lo importante ahora es que se extinga el incendio, que es lo que más me preocupa, y que nos informen si hay algún problema para los vecinos”, ha manifestado.

El alcalde, que también es parlamentario en las Cortes de Castilla-La Mancha, ha recordado que PSOE y Podemos tumbaron una enmienda presentada por él para los presupuestos de 2016 en la que pedía que se destinaran 500.000 euros para desmantelar este cementerio.