El PSOE quiere que voten en las locales los extranjeros con residencia

La propuesta socialista supondría la concesión del derecho de sufragio a un millón y medio de inmigrantes, de los que más de 700.000 proceden de Marruecos y 200.000 de China

Una pareja con las papeletas para votar en un colegio electoral de Madrid el pasado mayo.LUIS SEVILLANO

El PSOE se compromete en su programa electoral a que todos los inmigrantes con cinco años de residencia en España puedan votar, independientemente del país de origen, en las elecciones municipales. La iniciativa socialista supondría la concesión del derecho de sufragio a alrededor de un millón y medio de personas, la mitad de Marruecos, de países con los que España no tiene firmado un convenio de reciprocidad. En la actualidad solo pueden participar en los comicios locales los ciudadanos no comunitari...

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El PSOE se compromete en su programa electoral a que todos los inmigrantes con cinco años de residencia en España puedan votar, independientemente del país de origen, en las elecciones municipales. La iniciativa socialista supondría la concesión del derecho de sufragio a alrededor de un millón y medio de personas, la mitad de Marruecos, de países con los que España no tiene firmado un convenio de reciprocidad. En la actualidad solo pueden participar en los comicios locales los ciudadanos no comunitarios de una docena de Estados.

Un millón y medio de votantes potenciales

  • La propuesta del PSOE implicaría la concesión del sufragio a más de un millón y medio de personas provenientes de países con los cuales no hay firmado tratado de estas características.
  • La comunidad más favorecida sería la marroquí: a 30 de junio había en España 725.860 extranjeros nacidos en el país vecino con permiso para residir y circular libremente. Hace cinco meses había 956.972 africanos en régimen general.
  • Los nacionales de China (189.853 en régimen general en España) serían los siguientes más beneficiados por la iniciativa socialista. Les siguen los oriundos de Ucrania (76.078), Pakistán (66.673), Argelia (52.484), Senegal (51.127), Argentina (36.107), Rusia (34.803) e India (32.725).

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero impulsó en su segunda legislatura (2008-2011) la firma de convenios de reciprocidad con 12 países, la mayoría de América Latina, con una importante comunidad de ciudadanos en España, cumpliendo así una antigua demanda de colectivos sociales y organizaciones de inmigrantes (los ciudadanos de la UE no tienen trabas para participar en las municipales).

Los tratados firmados por España han permitido la participación en las elecciones locales de 2011 y del pasado mes de mayo de más de un millón de inmigrantes, oriundos de Ecuador (223.570 con certificado de registro o tarjeta de residencia en vigor en 2013, según datos del Instituto Nacional de Estadística), Colombia (162.374), Bolivia (131.312), Perú (85.735), Paraguay (48.964), Chile (23.778), Noruega (14.028), Cabo Verde (2.578), Corea del Sur (2.362), Islandia (1.105), Nueva Zelanda (446) y Trinidad y Tobago (43). Salvo en el caso de los noruegos, a los que les basta con tres años de residencia, los votantes de estos países deben haber residido en España “legal e ininterrumpidamente”, al menos cinco años antes de presentar la solicitud.

El objetivo de Pedro Sánchez, secretario general del PSOE y candidato a la presidencia del Gobierno, es “eliminar el principio de reciprocidad del derecho de sufragio en las elecciones municipales de los extranjeros residentes en España”. Así consta en el programa del PSOE, donde la medida se incluyó (no aparecía en el borrador) en el periodo de presentación de enmiendas. “No permitir a una parte de la sociedad participar en la construcción de sus barrios, pueblos y ciudades a través de la elección de quienes gestionan sus recursos es una injusticia que había que corregir”, explica Mohammed Azahaf, miembro de la Sectorial de Participación y Diversidad del PSOE y principal impulsor de esta medida socialista.

La supresión de los convenios de reciprocidad entre España y terceros países para que un extranjero vote en las municipales marcaría un antes y un después en el sistema electoral. Del millón y medio de beneficiarios potenciales, 725.860 son marroquíes (esta cifra se encontraba a 30 de junio de 2015 en régimen general: permiso para residir y circular libremente por España y desplazarse por otros países de la UE, sin residir o trabajar en ellos). En julio de 2011, la entonces ministra de Exteriores Trinidad Jiménez, adelantó su intención de firmar el convenio de reciprocidad con Marruecos. No fue posible por el adelanto electoral que se produjo, y en el que el PP desbancó al PSOE logrando la mayoría absoluta. Esta legislatura, el Gobierno de Mariano Rajoy no ha firmado ningún convenio más.

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700.000 marroquíes

Tras la comunidad marroquí, los siguientes colectivos de ciudadanos de origen extranjero a los que se concedería el derecho de sufragio serían los de China (189.853 en régimen general), Ucrania (76.078), Pakistán (66.673), Argelia (52.484), Senegal (51.127), Argentina (36.107), Rusia (34.803), India (32.725) y la República Dominicana (31.594).

Aunque el PSOE no concreta en su propuesta el tiempo mínimo de estancia para poder votar en las municipales, solo se facilitaría el derecho de voto a quienes lleven cinco años de residencia en el país. “No hablamos de conceder un derecho a recién llegados a nuestro país, hablamos de gente que lleva años viviendo, trabajando, pagando sus impuestos y ayudando al desarrollo y crecimiento de nuestras ciudades y pueblos. Son conscientes de sus obligaciones y derechos. En eso consiste la ciudadanía”, observa Azahaf.

Los países nórdicos son, una vez más, los más avanzados en este terreno: Suecia permite desde 1975 votar en las elecciones locales a los foráneos con tres años de residencia. Dinamarca también lo permite, con las mismas condiciones, desde 1981. En Finlandia pueden hacerlo desde 1996 los inmigrantes con dos años de residencia. Luxemburgo autorizó en 2003 a los inmigrantes con cinco años de residencia.

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