Muere Francisco Barrio, el ‘bárbaro del norte’ que desafió al PRI

Francisco Barrio, el gobernador de Chihuahua entre 1992 y 1998, falleció el pasado lunes en un hospital de Houston, Texas, donde recibía atención tras una operación cardiaca reciente. La muerte del político, exalcalde de la fronteriza Ciudad Juárez, fue confirmada por el Partido Acción Nacional (PAN), la organización en la que militó el grueso de su trayectoria política. Barrio tenía 75 años y estaba retirado de la política desde hace más de una década.

Conocido como Pancho Barrio, el chihuahuense fue uno de los llamados “bárbaros del norte”, un grupo de empresarios que en los años 80 decidieron incursionar en política, en las filas del Partido Acción Nacional, para luchar por democratizar sus Estados, que entonces eran férreamente gobernados por el Partido Revolucionario Institucional. Lo hizo a lado de figuras como Manuel J. Clouthier, “Maquío”, en Sinaloa; Ernesto Ruffo, en Baja California; Rodolfo Elizondo, en Durango, y Fernando Canales Clariond, en Nuevo León.

Barrio fue candidato a la alcaldía de Ciudad Juárez, Chihuahua, en 1983, y desde ahí impulsó su carrera para postularse a la gubernatura en la controvertida elección de 1986, en la que el PAN denunció un fraude electoral. Junto con el también chihuahuense Luis H. Álvarez -uno de los líderes históricos de Acción Nacional- Barrio encabezó uno de los primeros movimientos de protesta que surgieron en el país en demanda de elecciones libres y auténticas. En esos comicios, el entonces secretario de Gobernación, Manuel Bartlett, defendió la intervención del gobierno en favor del PRI afirmando que se trató de un “fraude patriótico”, para impedir que el PAN gobernara un estado fronterizo con Estados Unidos.

Barrio encabezó las impugnaciones a los resultados electorales mediante acciones de resistencia civil pacífica, que antecedieron a las protestas de la izquierda en contra del fraude electoral en las elecciones presidenciales de 1988. A la larga, la lucha del PAN en el norte del país, junto con la izquierda encabezada por Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez, dio pie a la creación del Instituto Federal Electoral en 1990, y al proceso de transición a la democracia.

Este activismo pavimentó el ascenso de Pancho Barrio en las filas de la oposición y, en 1992, ganó las elecciones de Chihuahua en su segunda postulación, con lo que se convirtió en el primer gobernador no priista de la entidad, y el segundo de oposición a nivel nacional, pues en 1989 el también panista Ernesto Ruffo había ganado Baja California.

Su gobierno fue de claroscuros y, en 1998, el PAN tuvo que entregar de nuevo la gubernatura al PRI, que la ganó postulando a Patricio Martínez García, un político que también contaba con una carrera como líder de cámaras empresariales.

Diputado y embajador

En el 2000, Barrio fue uno de los impulsores de la candidatura de presidencial de Vicente Fox, que enfrentaba la resistencia de los panistas doctrinarios, que desconfiaban del perfil empresarial del gobernador de Guanajuato. Fox rompió todos los esquemas de la política tradicional para convertirse, primero en candidato, y luego en presidente de la República. Cuando ganó la presidencia, anunció que su administración emprendería una lucha sin precedentes en contra de la corrupción y nombró a Francisco Barrio secretario de la Contraloría.

El nuevo zar anticorrupción anunció que se pescarían “peces gordos”, en referencia al esperado ajuste de cuentas con los políticos corruptos del régimen priista, pero muy pronto se topó con los acuerdos políticos del presidente Fox con el PRI, cuyas bancadas en el Congreso eran mayoritarias e impidieron que se procesara a los personajes señalados públicamente por actos de corrupción, como los líderes del Sindicato Petrolero, Carlos Romero Deschamps y Ricardo Aldana.

Barrio abandonó el gabinete de Fox en 2003, y fue postulado por el PAN como candidato a diputado federal. Fue nombrado coordinador de la bancada panista al inicio de la LIX Legislatura, pero unos meses después tuvo que solicitar licencia para someterse a una cirugía de corazón. Dejó la coordinación del grupo al diputado Germán Martínez Cázares en un momento crucial en el que se negociaba una reforma fiscal y la conformación de un nuevo Consejo General del Instituto Federal Electoral.

En 2005, cuando regresó de su convalecencia, Barrio anunció que buscaría la candidatura presidencial del PAN, en un proceso interno en el que también se mencionaba a otros políticos panistas como Carlos Medina Plascencia, Santiago Creel, Alberto Cárdenas y Felipe Calderón. Finalmente, Barrio declinó en favor de Calderón, quien a la larga ganó la candidatura del PAN y, en 2006, la presidencia de la República tras una polémica elección en la que aventajó por 0.56% a Andrés Manuel López Obrador.

Felipe Calderón anunció que lo incorporaría a su gobierno, pero nunca se concretó un nombramiento público. Barrio se alejó de la política y de Acción Nacional, que para entonces naufragaba en sus dificultades para asentarse como partido de gobierno. En 2009, el presidente anunció que Barrio sería nombrado embajador de México en Canadá, y pidió su confirmación al Senado de la República.

El panista chihuahuense ocupó esa embajada hasta abril de 2013, cuando el presidente Enrique Peña Nieto lo sustituyó por un político priista, Francisco Suárez Dávila.

Desde entonces, Pancho Barrio permaneció retirado de la política y, según panistas consultados, se dedicaba a sus negocios y su familia en su natal Chihuahua. Su muerte, provocada por sus padecimientos cardiacos, ha sido lamentada por sus excompañeros de partido, como el expresidente Felipe Calderón, quien lo ha calificado como “un luchador por la democracia”.

El expresidente Vicente Fox ha publicado un video en el que destaca su carácter firme y sus convicciones claras. “De esos que no se esconden, que dicen lo que piensan y trabajan de frente. Su paso dejó huella”, ha dicho el expresidente.

El exdirigente nacional del PAN Gustavo Madero, chihuahuense como él y uno de los últimos políticos de su estirpe, hoy retirado de Acción Nacional, ha escrito: “El gran Pancho Barrio falleció ayer al mediodía. Un gran líder político que despertó la energía de la ciudadanía chihuahuense en los años ochenta, para combatir la corrupción y el autoritarismo”.

Consultado para este obituario, el diputado Germán Martínez, quien lo sucedió como coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, ha dicho: “Pancho Bario tenía un corazón bravo del norte, que gastó en sus convicciones cotidiana y generosamente. No le ahorró ningún latido a la patria, su deber, ni a Tencha (su esposa) su cariño. El corazón de Pancho le falló ayer a su cuerpo, pero no le falló a la hora de abrir los caminos democráticos por los que muchos llegaron a los cargos públicos que ostentan”.