QiPO Fair: “Queremos que el público y los artistas puedan entablar puentes y colaboraciones más ricas y cruzando fronteras”
Laura Reséndiz, directora de la plataforma de arte colectivo, y el curador Pancho López hablan de su intención para tener un espacio que involucre a todos sin la visión centrada en las ventas
El centro de Ciudad de México es en estos días un ir y venir de artistas y aficionados a las diferentes expresiones del arte que buscan un espacio en donde acomodarse y quedarse a mirar. Las bulliciosas calles del corazón de la capital mexicana ofrecen eso y más, pero en el edificio Temoskali, en el barrio de la Ciudadela, la sede de QUiPO Fair se alista para los cuatro días en los que las dos plantas del lugar albergan más de 30 propues...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El centro de Ciudad de México es en estos días un ir y venir de artistas y aficionados a las diferentes expresiones del arte que buscan un espacio en donde acomodarse y quedarse a mirar. Las bulliciosas calles del corazón de la capital mexicana ofrecen eso y más, pero en el edificio Temoskali, en el barrio de la Ciudadela, la sede de QUiPO Fair se alista para los cuatro días en los que las dos plantas del lugar albergan más de 30 propuestas que han llegado de Asia, Europa, Sudamérica y Norteamérica. Laura Reséndiz, la directora ejecutiva, y Pancho López, curador de performance, aseguran que la semana del arte es una oportunidad inigualable para conocer este espacio en el que colaboran artistas y colectivos que buscan crear una comunidad y que se quiere vincular con el público que no necesariamente es coleccionista o amante del arte contemporáneo: “Queremos no solo que el público, sino que los artistas mismos puedan entablar puentes y otras colaboraciones más ricas y cruzando fronteras”, dice Reséndiz.
Es el día de la apertura de las puertas del edificio Temoskali a la cuarta edición de QUiPO Fair y aunque ya casi está todo listo, curadores, artistas, y colaboradores afinan los últimos detalles y vuelven a ensayar y a reacomodar todo una vez más. Hay instalaciones de todo tipo, música que se empieza a oír de varios puntos del lugar; cuadros y salas repletas de referencias a la cultura pop, globos de colores, una mujer merodea por los pasillos vestida de una virgen. Laura Reséndiz, la directora ejecutiva de QUiPO está tranquila y emocionada, y con una voz clara y radiofónica comienza a contar la trayectoria que la trajo hasta aquí. Es historiadora del arte por formación, pero ha hecho crítica de arte, televisión, producción, curaduría. Ha trabajado en galerías y ha fundado el proyecto multidisciplinario CICLO Arte para todos. “Llegué a QUiPO por invitación de Ichiro Irie —el director artístico—, con la intención de generar nuevas audiencias y haciendo lo que ya estábamos haciendo con nuestros recursos, para que uniéramos fuerzas y generáramos proyectos más grandes, más ambiciosos y más concretos. Teníamos ya la inquietud de presentar otras propuestas en un espacio dirigido por artistas con otras intenciones fuera del mercado”, cuenta.
Desde su origen, según relata Reséndiz, esta plataforma buscó integrar propuestas que fueran en sintonía con lo que ellos estaban haciendo, incluso antes de colaborar como colectivo. “Propuestas —como la nuestra— que no tenían cabida en las grandes ferias, primero porque no cumplíamos con los requisitos de ser una galería comercial o no tener la temporalidad de tres o cinco años de carrera, también porque nuestros intereses eran completamente distintos entonces competir con un mercado que de pronto es muy agresivo si no es tu objetivo único es muy complicado”, cuenta.
La decisión se centró entonces en dar continuidad a hacer año con año una feria con la misión de compartir visiones con público y artistas: “Queremos mostrar a la gente que hay otras formas de conocer, vivir, entender y disfrutar el arte y en ese sentido, pues también buscamos entonces abrirnos a otros públicos, abrirnos a otras audiencias que no necesariamente son conocedoras o coleccionistas y que el arte contemporáneo a veces puede ser bastante intimidante si no estás inserto en esta comunidad y por eso queremos ser una feria con una calidad como todas las demás a nivel museo y galería, pero gratuita”.
“El lenguaje del cuerpo es mucho más potente que las palabras”
Reséndiz conoció en 2019 a Pancho López, un artista de performance con una trayectoria de más de 20 años en México y con proyectos en varios países del mundo. Así, hace un año lo invitó a ser parte del proyecto, y en esta cuarta edición, López es el encargado de la parte de performance que tiene lugar en QUiPO —a decir de Reséndiz una de los ejes fuertes de la oferta artística— en el marco de la semana del arte: “El performance sirve para decir lo que a veces no puedes decir. Con el cuerpo creas metáforas, analogías muy interesantes con las acciones y puedes abordar temas inabordables o cosas tan íntimas que no hay manera de cómo explicar un sentimiento. El lenguaje del cuerpo es mucho más potente, incluso a veces que las palabras. El performance es un traductor inmediato de cualquier situación”, explica López.
Durante estos días, como parte del programa de performance, estarán presentes artistas nacionales e internacionales con piezas duracionales como Alexia Miranda (El Salvador), Prem Shiva (Colombia/México), Celeste Flores (México), María Eugenia Chellet (México) y Mercedes Aquí (Argentina/México). “Lo que me interesa mucho por lo menos en el performance duracional es la interacción, que las piezas que sean comunitarias, que sean colectivas, que involucren un contacto con el público, no que sean estas piezas que nadie entiende, sino que en un marco de una feria, que es un acto comunicativo, sea un acto con una comunidad artística y lazos entre galerías, pues estas acciones intentarán hacer lo mismo”, dice.
Como parte de los proyectos especiales en QUiPO, se exhibirá una instalación escultórica del artista guerrernse Aníbal Catalán, una instalación de luz de Fernando Rascón y una instalación de pintura de Ricardo Harris-Puentes. El diseño e iluminación del salón ha sido con el liderazgo de Martin Durazo. La música que acompaña el recorrido por cada espacio de la feria será dirigido por TuttoFritti Radio (TFR); la selección musical y transmisión, de Mixmaster Kar, El Fritojaguayano y Mortishead.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país