México confirma la participación de Nicolás Maduro en la cumbre sobre migración de Palenque
La canciller, Alicia Bárcena, visita Venezuela durante los preparativos del encuentro diplomático y para dar seguimiento a los diálogos entre la oposición y el chavismo
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, participará en la cumbre sobre migración convocada por México en Palenque (Chiapas) del próximo fin de semana. Así lo confirmó este lunes la Cancillería mexicana, durante la visita de trabajo que realiza la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, en Venezuela. El líder s...
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, participará en la cumbre sobre migración convocada por México en Palenque (Chiapas) del próximo fin de semana. Así lo confirmó este lunes la Cancillería mexicana, durante la visita de trabajo que realiza la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, en Venezuela. El líder sudamericano tiene previsto acudir de forma presencial a la reunión, señalaron fuentes diplomáticas a EL PAÍS. La delegación mexicana celebró también la decisión de retomar los diálogos iniciados en 2021 México entre el chavismo y la oposición, que están previstos a reactivarse este martes en Barbados, y anunció que acompañará las negociaciones.
“Ambos coincidieron en la importancia de sostener un diálogo franco con los demás países invitados para enfrentar mejor los enormes retos que supone la movilidad humana, desde una perspectiva de desarrollo y atendiendo a las causas estructurales”, se lee en el comunicado oficial de México, tras la reunión entre Bárcena y Maduro en Caracas. El anuncio de la visita de Maduro a Chiapas, en el sur del país norteamericano, se da menos de dos semanas después de que Estados Unidos diera a conocer que reactivará las deportaciones masivas de venezolanos y que ampliará una sección de poco más de 32 kilómetros del cerco fronterizo con México.
Tras la visita a Ciudad de México del jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, a principios de este mes, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, convocó a jefes de Gobierno y altos funcionarios de 11 países de Latinoamérica en la ruta hacia Estados Unidos para formar un frente común ante la crisis migratoria. “Podemos hacer muchas cosas nosotros y también si estamos de acuerdo, podemos buscar la cooperación del Gobierno de Estados Unidos, que ayuden, lo están haciendo, pero que se apliquen más para atender las causas, no solo estar pensando en muros o militarizar la frontera, sino atender las necesidades de la gente”, señaló el viernes López Obrador.
La cumbre del próximo 22 de octubre, llamada formalmente Encuentro por una Vecindad Fraterna y con Bienestar, contará también con la participación del presidente colombiano, Gustavo Petro, adelantó López Obrador la semana pasada. Además de Venezuela y Colombia, están convocados también representantes de Belice, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras y Panamá. “Todavía hoy vamos a saber quiénes van a asistir”, dijo el presidente mexicano en su conferencia de prensa de este lunes. La semana pasada confió en que la mayoría de los presidentes y los cancilleres de la región puedan participar.
Tras sostener varias reuniones con autoridades del país sudamericano en el Palacio de Miraflores, México y Venezuela acordaron estrechar lazos económicos y promover la autosuficiencia energética, de acuerdo con el comunicado mexicano. “Reafirmamos el compromiso de avanzar en la cooperación en áreas claves para abordar los desafíos globales”, refirió Maduro en el boletín del Ministerio venezolano de Exteriores, en el que se destaca también “la visión común de un mundo más justo y equitativo”, pero no se dan más detalles. La visita de trabajo, subrayó Caracas, se da un mes después de la cumbre del G77+China celebrada en La Habana, Cuba.
Más de 7,7 millones de venezolanos han dejado el país sudamericano en los últimos años, de acuerdo con cifras de la Organización de las Naciones Unidas. López Obrador declaró la semana pasada que espera la cumbre pueda traducirse en acuerdos concretos y que incidan sobre el terreno, en tiempos en que las detenciones en la frontera sur de EE UU rondan cifras récord y en que se multiplican las presiones para atajar la migración en Estados Unidos.
“Acá lo que queremos es ver qué hacemos ante el crecimiento del flujo migratorio, de manera muy concreta, cómo nos ayudamos y cómo ayudamos a nuestros pueblos”, señaló el mandatario mexicano. Está previsto que el encuentro diplomático dure alrededor de dos horas y que después se ofrezca una comida y una conferencia de prensa conjunta sobre los avances.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país