He puesto a prueba cuatro powerbanks con carga solar y esta es mi experiencia

Pese a su complejo nombre en inglés, una powerbank no es otra cosa que una batería externa que se conecta a la corriente eléctrica por medio de un cable para cargarse y, de este modo, llenar después la batería de otros dispositivos electrónicos como el teléfono móvil o la tablet cuando no hay un enchufe cerca. Las protagonistas de esta comparativa tienen una característica adicional: incorporan una o varias placas solares para aprovechar la energía procedente del sol. Por lo tanto, para espacios exteriores como una acampada o una excursión a la montaña son una opción muy interesante.

¿Cómo hemos elegido y probado los productos?

Para elegir los modelos participantes en esta comparativa fijé un presupuesto máximo de 50 euros. Y a la hora de realizar las pruebas, debo puntualizar que me he centrado en exclusiva en sus capacidades como cargadores solares, porque este es el objetivo del artículo. Visto que necesitaban muchísimas horas para cargarse, la alternativa más eficiente que encontré fue situarlas en la terraza de mi casa, a la que da el sol directo todo el día. Luego, me las he llevado en mis excursiones de fin de semana, pero como realmente he comprobado la velocidad de carga de los dispositivos ha sido haciendo pruebas en mi propia casa. A modo de conclusión os adelanto que, tras mi experiencia, personalmente utilizaría la función de carga solar como un complemento a la carga por cable, y no como método de recarga en exclusiva. Dicho esto, los aspectos que he valorado han sido los siguientes:

• Diseño: no tanto desde el punto de vista de su tamaño (todos cuentan con unas dimensiones compactas que facilitan su transporte), sino de la calidad de su fabricación.
• Conectividad: ¿Cuántos puertos tiene la powerbank? Este dato es importante porque algunos modelos permiten alimentar la batería, mediante cable, de más de un dispositivo electrónico a la vez. Si además admite la carga inalámbrica, es una característica a valorar también.
• Función carga solar: cómo es el proceso de carga de la powerbank cuando la exponemos al sol y si después es posible cargar la batería de nuestro dispositivo sin problemas. Cabe recordar que con la carga solar estas baterías externas tardan siempre más en cargarse que al usar cable, por eso hay que ser pacientes.
• Linterna: estos modelos al estar pensados para utilizarse en espacios exteriores incorporan una linterna. ¿Cómo es? ¿La luz que arroja es suficiente? ¿Tiene varios modos de uso?

En azul y naranja: Acelufly

Para quién es: ¿necesitas un modelo que incorpore cables de carga? Esta propuesta puede que te interese.

Por qué lo hemos elegido: la experiencia que he tenido ha sido una de las mejores de la comparativa. Como las demás, tarda muchísimo en cargarse si decidimos optar únicamente por su función de carga solar pero, en este caso, y tras comparar el tiempo que invertí, al final del día conseguí una carga del 60%, valor que no obtuve con el resto, Además, cuando se trata de alimentar la batería de nuestros dispositivos, en mi caso, me llevé una grata sorpresa porque la powerbank no me dio ningún error ni hizo ‘cosas extrañas’.

Su diseño, al igual que el de sus competidores, ha sido reforzado para utilizarse en espacios abiertos sin miedo a que un golpe o un choque involuntario no permita usarla. Su reclamo más interesante es que viene con cuatro cables de carga para emplearla con diferentes dispositivos, de modo que en ningún momento he tenido que estar pendiente de localizar el que necesitaba en cada momento dependiendo de lo que fuera a cargar porque todos están a mano: en concreto, contamos con un cable USB-C, un USB-A, un cable miniUSB y otro específico para dispositivos iOS. Además, dispone de tres conexiones físicas también protegidas mediante tapa y bajo la cual hay un puerto USB-C, otro USB-A y un conector para utilizar con los productos de la firma de la manzana.

Sus puntos débiles: la potencia lumínica de su linterna LED doble es mejorable.

Tres modos de linterna: Hiluckey T11W

Para quién es: si buscas un modelo con carga solar que además te permite cargar por cable y de manera inalámbrica, ¡mira!

Por qué lo hemos elegido: esta alternativa no es una mala opción si tenemos pensado adquirir una powerbank con función de carga solar. Al principio tienes la impresión, cuando la pones al sol, que no sucede nada, pero cuando lleva varias horas de exposición el proceso se agiliza y al final del día es capaz de llenar algo más de la mitad de su batería. Como el resto de modelos, incluye un LED de carga que con un simple vistazo me ha ayudado a conocer la capacidad de carga que le resta hasta tener que volverla a cargar. Lo que me costó un poco más fue conseguir que mi móvil comenzara a cargar, porque a la mínima que se mueve estando colocado sobre el panel la energía no le llega bien. Logra una buena valoración desde el punto de vista del diseño y su linterna funciona perfectamente, pudiendo escoger como en el modelo de SenDeLuz entre tres modos; para mí, el mejor de todos es el modo constante.

Sus puntos débiles: aunque se puede llevar de un sitio a otro sin problemas, es la opción de mayor peso (470 gr).

Con cuatro paneles de carga: SenDeLuz Solar Charge

Para quién es: para los usuarios que quieren una powerbank solar que admita carga inalámbrica.

Por qué lo hemos elegido: la primera impresión que transmite es que se trata de un dispositivo con un diseño resistente que resulta adecuado para espacios abiertos; un detalle a tener en cuenta es que sus conexiones físicas (posee dos puertos USB-A y uno USB-C) están protegidas contra el polvo y cualquier otro elemento externo gracias a una tapa de plástico.

Está provista de cuatro paneles que se despliegan y repliegan de manera cómoda y rápida. Además, dispone en uno de sus laterales de un indicador de carga solar. En cuanto a la experiencia de uso he tenido sensaciones un poco enfrentadas. A priori la calidad de estos paneles parecía buena, pero durante las pruebas el proceso de carga de esos 26800 mAh se ha ralentizado muchísimo: aun teniéndolo todo el día recibiendo la luz del sol no conseguí alimentar más del 50% de su capacidad. Pude, eso sí, cargar parte de los 4000 mAh de la batería de mi móvil, pero este proceso se mostró inconsistente en ocasiones porque me dio algún que otro error. Destacar, por otro lado, que es compatible con la tecnología de carga inalámbrica (15 vatios).

Sus puntos débiles: las instrucciones no son muy claras.

Para colgar en la mochila: Toennesen

Para quién es: se dirige a los usuarios que busquen funciones adicionales.

Por qué lo hemos elegido: sus dimensiones (164 x 84 x 17 mm) y su peso (285 gr) se sitúan dentro de la media, por lo que llevarlo en los desplazamientos es cómodo; la he llevado siempre colgada de una mochila pequeña en mis salidas y no aportaba prácticamente peso a lo que ya llevaba. En este sentido, me ha parecido muy útil su diseño, en el que uno de los laterales se abre para encajarse en allá. Con certificación IPX4 contra el agua, su estructura está ‘bañada’ por materiales que refuerzan su durabilidad mientras sus puertos físicos quedan protegidos por una pestaña que al principio, cuando la usas, está un poco dura. Su función linterna es de las mejores de la comparativa por su potencia lumínica.

Sus puntos débiles: aunque ofrece una buena capacidad (26800 mAh), el rendimiento de su único panel solar es muy bajo y apenas conseguí cargar el 10% de la batería de mi teléfono Samsung tras varias horas e intentos.

Otros modelos de powerbanks con carga solar interesantes:

Si estás buscando una powerbank con carga solar que destaque por su especial ligereza: el modelo RevolutionLine solo pesa 150 gr. Tiene una capacidad de 5000 mAh y permite cargar a la vez dos dispositivos.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 31 de julio de 2024.

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