Un Polanski "emocionado" rompe su silencio

Desde la localidad suiza de Gstaad donde se encuentra en arresto domiciliario, Roman Polanski ha roto su silencio para dar las gracias por las muestras de apoyo que ha recibido. A pocos días de que la justicia helvética decida sobre la petición de extradición de Estados Unidos, el cineasta ha enviado una carta a su amigo el filósofo Bernard-Henri Lévy, que éste envió ayer a France Presse.

En ella dice estar "emocionado por la cantidad de testimonios de simpatía y de apoyo que he recibido en la prisión de Winterthur [donde estuvo preso, tras ser arrestado el 26 de septiembre en el aerop...

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Desde la localidad suiza de Gstaad donde se encuentra en arresto domiciliario, Roman Polanski ha roto su silencio para dar las gracias por las muestras de apoyo que ha recibido. A pocos días de que la justicia helvética decida sobre la petición de extradición de Estados Unidos, el cineasta ha enviado una carta a su amigo el filósofo Bernard-Henri Lévy, que éste envió ayer a France Presse.

En ella dice estar "emocionado por la cantidad de testimonios de simpatía y de apoyo que he recibido en la prisión de Winterthur [donde estuvo preso, tras ser arrestado el 26 de septiembre en el aeropuerto de Zúrich, hasta el 4 de diciembre] y que sigo recibiendo aquí, en este chalé de Gstaad donde paso las fiestas con mi mujer y mis hijos".

Polanski, de 76 años, perseguido por la justicia estadounidense por haber tenido en 1977 relaciones sexuales con una adolescente de 13 años, subraya cuánto le "gustaría poder decir a cada una de esas personas el bien que causa, cuando uno está en una celda, oír cada mañana, al recibir el correo, ese murmullo de voz humana y solidaridad". "Cada palabra fue para mí en esos momentos tan terribles, y sigue siendo en mi situación actual, un motivo de consuelo y de esperanza". Y explica que, como "responder a todos" los mensajes es una tarea "imposible" autoriza a Lévy a hacer públicas esas líneas.

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