Un alcalde ahorrador

El alcalde de Londres, Ken Livingstone, tiene una recomendación muy sencilla, a la vez que bastante sucia, para ahorrar agua en periodo de falta de lluvias como el actual: no tirar de la cadena del retrete. Durante los últimos 15 meses, ni el alcalde ni los otros miembros de su familia han tirado de la cadena tras orinar simplemente, según confiesa en el diario The Independent. El político laborista está tan convencido de la bondad de lo que hace que no duda en recomendar a sus conciudadanos que sigan su ejemplo y eviten así el despilfarro de agua. Sin embargo, Londres es una ciu...

El alcalde de Londres, Ken Livingstone, tiene una recomendación muy sencilla, a la vez que bastante sucia, para ahorrar agua en periodo de falta de lluvias como el actual: no tirar de la cadena del retrete. Durante los últimos 15 meses, ni el alcalde ni los otros miembros de su familia han tirado de la cadena tras orinar simplemente, según confiesa en el diario The Independent. El político laborista está tan convencido de la bondad de lo que hace que no duda en recomendar a sus conciudadanos que sigan su ejemplo y eviten así el despilfarro de agua. Sin embargo, Londres es una ciudad que derrocha diariamente millones de litros de agua potable para lavar los coches, regar los céspedes o eliminar la orina. "Modificando el diseño de los edificios puede lograrse mucho, pero aún es más lo que puede conseguirse cambiando las costumbres diarias", dice el alcalde. "Si la gente usa menos el coche y más la bicicleta, tira menos de la cadena del retrete, o se asegura de que las lámparas de la luz en su casa ahorran energía, todos saldremos ganando", agrega.