Un catedrático de la Pontificia cree que los matrimonios gays "no garantizan el sostenimiento de una sociedad"

El teólogo afirma que "no se puede considerar iguales cosas que son desiguales"

El catedrático de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, Olegario González de Cardedal, considera que los matrimonios entre homosexuales "no garantizan la perduración, el sostenimiento y la vida de una sociedad" y lo que se está haciendo, en su opinión, es "ofender al 99,9 por ciento de los matrimonios reales que se ven, de esta manera, marginados".

González de Cardedal se refirió así al texto que la Conferencia Episcopal remitió hace unas semanas en el que instaba a los parlamentarios católicos a votar en contra de la nueva ley que quiere aprobar el gobierno del Partido So...

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El catedrático de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, Olegario González de Cardedal, considera que los matrimonios entre homosexuales "no garantizan la perduración, el sostenimiento y la vida de una sociedad" y lo que se está haciendo, en su opinión, es "ofender al 99,9 por ciento de los matrimonios reales que se ven, de esta manera, marginados".

González de Cardedal se refirió así al texto que la Conferencia Episcopal remitió hace unas semanas en el que instaba a los parlamentarios católicos a votar en contra de la nueva ley que quiere aprobar el gobierno del Partido Socialista. En este sentido, invitó a toda la gente "a leer el texto completo" que, a su juicio, "no tiene ninguna palabra ofensiva ni negativa sobre los homosexuales y sí reclama respeto y un cierto reconocimiento en su orden propio".

"La cuestión de fondo" para este teólogo es "que no se puede considerar iguales cosas que son desiguales" de modo que "no se puede transferir una palabra que lleva siglos refiriéndose a la unión del hombre y la mujer como signo de futuro". "Los ríos llevan agua y el mar tiene agua; una es dulce y la otra salada; uno desembocan y otro no", añadió al respecto.

En cuanto a la posibilidad de adopción de niños por parte de parejas de un mismo sexo, González de Cardedal señaló que "nacer, crecer, forjarse y constituirse como persona es una realidad muy compleja que está determinada por la doble frontalidad maternal-fraternal". "Los niños no son los juguetes con los que los mayores se distraen" incidió este miembro de la Real Academia de las Ciencias Morales y Políticas.

Estas afirmaciones tuvieron lugar hoy en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), donde González de Cardedal dirige la Escuela de Teología Karl Rahner-Hans U.Balthasar que, en esta edición, trata el tema de Dios, religión e iglesias en las Constituciones Europeas. En esta línea, indicó que se debate sobre "lo que ha sido la trayectoria religiosa, política y constitucional de los distintos países de Europa para así tener una perspectiva de futuro".

CONSTITUCIÓN EUROPEA

Respecto a la no inclusión del cristianismo en la nueva Constitución Europea, González de Cardedal señaló que la alusión religiosa en las constituciones está en los preámbulos, de modo que "si se quiere hacer un preámbulo de naturaleza histórica, que quiera recoger lo que han sido los fundamentos, las fuentes y las raíces de lo que es Europa, el olvido o el silenciamiento del cristianismo es un rechazo explícito que, evidentemente, es una represión de la realidad"

Asimismo, subrayó que las raíces cristianas son una realidad viva "de millones y millones de siglos que tiene millones y millones de creyentes en la Unión Europea". "Eso es lo que hay que tener en cuenta", apostilló.

FEMINISTAS

También se refirió González de Cardedal a la polémica suscitada en las últimas semanas respecto a las críticas que el Vaticano vertió contra las asociaciones feministas. Según dijo, en una sociedad libre todo el mundo pueden expresar su opinión, al tiempo que remarcó que "nadie ha promovido y ha hecho por la mujer tanto como Juan Pablo II".

En este sentido, manifestó que él "quiere vivir en un mundo donde no haya marginaciones, ni discriminaciones por ninguna razón" y aseguró no estar dispuesto "a una unisexualización de la vida humana en todos los ordenes porque sería privarla de esa admirable complejidad con la que Dios la creo".

Por otro lado, matizó que "la paridad como signo de voluntad de integración es positivo, pero mecánicamente utilizado es una segregación negativa para hombres y mujeres". Al respecto, consideró que "hay muchísimas mujeres que está en contra de ese feminismo nivelador, igualitario, que repercute negativamente en las mujeres.

Finalmente, preguntado por un posible descenso del número de fieles que acuden a la Iglesia, en especial la población más joven, González de Cardedal consideró que la presencia pública de la Iglesia ha cambiado con respecto a hace treinta años y criticó que "quien no tiene la perfección de la metamorfosis de la expresión religiosa, entiende poco".

Janet Thomson (izquierda) y Jamye Ford, tras su boda el jueves en el Ayuntamiento de San Francisco.ASSOCIATED PRESS