El euro se desploma mientras el petróleo continúa su escalada

El pesimismo se adueñó ayer de los mercados financieros, que arrastraron al euro a un nuevo mínimo histórico. La moneda europea ya acumula una pérdida de más del 25% desde el 1 de enero de 1999, fecha de su nacimiento. El cambio fijado ayer con el dólar fue de 0,8818 (188,68 pesetas), aunque durante la tarde bajó a los 0,8690. La escalada del precio del petróleo, que ayer alcanzó los 34 dólares por barril, y su efecto devastador sobre la inflación han empeorado las expectativas de crecimiento en la zona del euro.

Las declaraciones del canciller alemán, Gerhard Schröder, del martes sobre...

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El pesimismo se adueñó ayer de los mercados financieros, que arrastraron al euro a un nuevo mínimo histórico. La moneda europea ya acumula una pérdida de más del 25% desde el 1 de enero de 1999, fecha de su nacimiento. El cambio fijado ayer con el dólar fue de 0,8818 (188,68 pesetas), aunque durante la tarde bajó a los 0,8690. La escalada del precio del petróleo, que ayer alcanzó los 34 dólares por barril, y su efecto devastador sobre la inflación han empeorado las expectativas de crecimiento en la zona del euro.

Las declaraciones del canciller alemán, Gerhard Schröder, del martes sobre la conveniencia de una moneda débil para fomentar las exportaciones fueron el detonante que provocó ayer el hundimiento del euro. El origen de este vertiginoso descenso está, sin embargo, en el empeoramiento de las expectativas de inflación por la escalada del precio del crudo. Además, el aumento del precio del dinero del 0,25%, hasta el 4,50%, acordado por el Banco Central la semana pasada se consideró una medida insuficiente para el control de la inflación. En paralelo, el precio del petróleo sigue disparado. Ayer alcanzó los 34 dólares por barril (uno más que el día anterior). Para este fin de semana está prevista una reunión de la OPEP, de la que se espera una pequeña subida de la producción. Ante esa reunión, Bruselas intenta quemar los últimos cartuchos. Ayer redobló su presión sobre el cartel para que decida sacar más petróleo al mercado y así bajar los precios. El malestar es creciente, sobre todo en Francia, donde sigue el bloqueo a refinerías y el desabastecimiento de combustible. Las protestas de los camioneros y agricultores se extendieron ayer al tráfico de puntos fronterizos, a los que acuden en masa coches para repostar ante las restricciones en Francia. En España, tanto el PSOE como CiU presentaron en el Congreso sendas interpelaciones urgentes para pedir al Gobierno que adopte medidas para frenar el precio de los carburantes.