SOCIEDAD

Un estudio sitúa a la Complutense como la mejor universidad pública

Los rectores consideran el informe 'llamativo pero poco riguroso'

Las universidades públicas españolas obtienen en calidad una nota media de 6,6. Así lo establece el estudio elaborado por el catedrático de Sociología de la Universidad de Barcelona Jesús de Miguel, quien suspende a ocho universidades y da como ganadoras a la Complutense (Madrid) y a la Universidad de Navarra. Los rectores critican la falta de 'rigor' del método empleado en este estudio. 'Más parece un medallero de las olimpiadas', criticó el presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, Saturni...

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Los rectores consideran el informe 'llamativo pero poco riguroso'

Las universidades públicas españolas obtienen en calidad una nota media de 6,6. Así lo establece el estudio elaborado por el catedrático de Sociología de la Universidad de Barcelona Jesús de Miguel, quien suspende a ocho universidades y da como ganadoras a la Complutense (Madrid) y a la Universidad de Navarra. Los rectores critican la falta de 'rigor' del método empleado en este estudio. 'Más parece un medallero de las olimpiadas', criticó el presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, Saturnino de la Plaza.

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En este segundo informe encargado por Gaceta Universitaria, Jesús De Miguel y su equipo de investigación señalan a la Universidad Complutense como la mejor entre las públicas, con una nota de 9,6, y a la de Navarra (del Opus Dei), en el primer puesto entre las privadas con un 14,4. La universidad que saca menos nota es la UNED y el estudio destaca, entre los indicadores que se han tenido en cuenta, que 'apenas un 12% de los estudiantes terminan la carrera en los años justos'. Los estudiantes de esta universidad son en muchos casos personas que, además, trabajan, por eso eligen una formación a distancia. El estudio destaca que la UNED no es una universidad 'estrictamente comparable'.

Entre los indicadores elegidos, 'todos en proporción al tamaño de las universidades', se tiene en cuenta el PIB de la provincia o región, la antigüedad de la universidad, la dependencia privada o pública, el número de centros con estudios de carreras largas. Para medir los recursos se mira la tasa de profesores en relación con el número de alumnos, la del personal de administración y servicios y el número de libros por estudiante en las bibliotecas de los centros. Y entre los indicadores de funcionamiento se ha trabajado con la proporción de estudiantes que realizan carreras largas (de segundo ciclo), la proporción del profesorado femenino. También se han medido, como indicadores de resultados, la proporción de estudiantes que terminan la carrera en los años justos y la tasa de tesis doctorales aprobadas. Respecto al estudio que se hizo en 1998, las universidades españolas han mejorado de calidad, 'ya que, utilizando exactamente la misma fórmula (e indicadores), la media de las 44 universidades públicas originales pasa de 5,7 a 6,6', indica el informe.

La universidad que más ha mejorado es la Universidad Politécnica de Cataluña, que sube 22 puestos en la clasificación actual, aunque, entre las politécnicas, la de Valencia sube sólo dos puestos, y la Politécnica de Madrid baja cuatro. Otras universidades bajan, 'curiosamente casi todas en el sur', explica el estudio. Desciende Málaga (13 puestos) y Alicante (10 puestos). También Sevilla y Extremadura. 'La Universidad del País Vasco, que estaba antes en un puesto muy bajo para lo que es esperable -en el puesto 21 de 44 universidades públicas- sigue bajando, situándose siete puestos más abajo. El caso de la Universidad del País Vasco es problemático, dependiendo de la situación social que sufre Euskadi', explican los autores.

La Universidad de Navarra (14,4) es la mejor entre las privadas, seguida de la Católica de Ávila 10,8 y la Ramón Llull (10,8). Pero el estudio advierte que 'no se puede realizar un análisis refinado de calidad con universidades tan recientes y pequeñas', como son algunas privadas.

Esta clasificación de De Miguel no gusta en la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, que ya criticaron el primer informe. El presidente de la Conferencia, Saturnino de la Plaza, rechaza el método usado: 'No se pueden comparar cosas que no son comparables ni sumar peras con manzanas. Esto puede confundir a los ciudadanos porque se está haciendo un ránking global con unos indicadores muy discutibles', criticó.

Para De la Plaza, se podrían comparar titulaciones, pero no universidades en su conjunto. 'Decir cuál es la mejor o la peor es llamativo, pero poco riguroso', dijo. Además le sorprende que las universidades suban o bajen en esa escala 'tantos puestos en tan poco tiempo'. También encuentra 'discutible' que los indicadores usados midan la calidad. 'Las universidades politécnicas no salen bien valoradas, cuando sus titulados tienen una altísima aceptación en el mercado laboral', puso por ejemplo. 'Si se usa el indicador de cuántos años usa el alumno para sacar la carrera, una universidad que diera aprobado general sería, según esto, la de mayor productividad', argumentó.