LA TOSCANAFRAKTION Y BERLUSCONI

Silvio Berlusconi se pasó de nuevo. El presidente del Gobierno italiano quiso mostrar su orgullo por la atracción que ejerce la región de Toscana y reveló a los periodistas que el ministro de Exteriores alemán, Joschka Fischer, le había confiado su sueño de retirarse a ese idílico rincón a producir aceite de oliva. El anuncio cogió desprevenido a Fischer que, en la comparecencia conjunta tras la reunión que mantuvieron ambos en Roma, tuvo que hacer gala de sus reflejos para precisar que no es una decisión inmediata, habida cuenta de las elecciones previstas para otoño en Alemania...

Silvio Berlusconi se pasó de nuevo. El presidente del Gobierno italiano quiso mostrar su orgullo por la atracción que ejerce la región de Toscana y reveló a los periodistas que el ministro de Exteriores alemán, Joschka Fischer, le había confiado su sueño de retirarse a ese idílico rincón a producir aceite de oliva. El anuncio cogió desprevenido a Fischer que, en la comparecencia conjunta tras la reunión que mantuvieron ambos en Roma, tuvo que hacer gala de sus reflejos para precisar que no es una decisión inmediata, habida cuenta de las elecciones previstas para otoño en Alemania. 'Que no se hagan ilusiones', señaló el dirigente verde dirigiéndose a sus rivales de la CDU-CSU y a su nuevo líder Edmun Stoiber para aclararles que su sueño está destinado a convertirse en realidad sólo 'cuando cumpla 60 años'. En su ayuda acudió el propio Berlusconi que previamente le había puesto con su inesperado anuncio en el aprieto: 'Puedo confirmar que era un sueño a largo plazo', dijo el primer ministro italiano entre las sonrisas de los presentes. Poco antes, el titular de Exteriores alemán había subrayado 'el fuerte afecto y la gran simpatía' que tiene hacia Italia, desde su pertenencia al club que los italianos llaman Toscanafraktion, club de enamorados de las tierras florentinas y sienesas, al que pertenecen muchos políticos germanos.-