LA FIESTA DEL AGUARDIENTE

El aguardiente de Liébana terminará perdiendo tan hermoso nombre, si no la fama, a poco que el PP se empeñe en nombrar cada año orujero mayor de Potes a alguno de sus dirigentes. Este año lo ha hecho con el ministro Juan José Lucas, que hereda el honor de Manuel Fraga, entre otros de igual ideología. La mal llamada Fiesta del Orujo se celebró el sábado en Potes, la capital cántabra de los Picos de Europa, sumida en una gran nevada. 'Es el mejor orujo del mundo', dijo Lucas en referencia al aguardiente que los lebaniegos destilan a partir del orujo de una uva comprad...

El aguardiente de Liébana terminará perdiendo tan hermoso nombre, si no la fama, a poco que el PP se empeñe en nombrar cada año orujero mayor de Potes a alguno de sus dirigentes. Este año lo ha hecho con el ministro Juan José Lucas, que hereda el honor de Manuel Fraga, entre otros de igual ideología. La mal llamada Fiesta del Orujo se celebró el sábado en Potes, la capital cántabra de los Picos de Europa, sumida en una gran nevada. 'Es el mejor orujo del mundo', dijo Lucas en referencia al aguardiente que los lebaniegos destilan a partir del orujo de una uva comprada ahora, en su mayor parte, en tierras castellanas (las escasas viñas que quedan en la zona pierden cada año su valiosa cosecha a manos de los jabalíes). Los concejales socialistas de la comarca boicotearon el festejo (por orujero / pepero), con ironías añadidas sobre el abandono de las carreteras locales a cargo del PP. Un ejemplo: el ministro Lucas no pudo llegar a Potes ni a través del puerto de Piedrasluengas ni por el de San Glorio, ambos cerrados por la nieve y en pésimas condiciones de tránsito, sino haciendo un rodeo hasta Torrelavega, que tampoco cuenta con autopista desde la meseta.-