El PSOE culpa a Aznar del 'caso Gescartera' por haber debilitado al Estado

El caso Gescartera, la evaporación de unos 18.000 millones de pesetas de la agencia de valores que presidía la hermana del dimitido secretario de Estado de Hacienda, Enrique Giménez-Reyna, no es una simple estafa, sino la consecuencia de una política consciente de debilitamiento del Estado y de sus mecanismos de control aplicada por José María Aznar. Éste es el planteamiento con el que el PSOE acudirá a la comisión de investigación que este viernes se constituye en el Congreso. La Ejecutiva socialista ultimará hoy su estrategia.

Aunque la dirección del PSOE, ...

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El caso Gescartera, la evaporación de unos 18.000 millones de pesetas de la agencia de valores que presidía la hermana del dimitido secretario de Estado de Hacienda, Enrique Giménez-Reyna, no es una simple estafa, sino la consecuencia de una política consciente de debilitamiento del Estado y de sus mecanismos de control aplicada por José María Aznar. Éste es el planteamiento con el que el PSOE acudirá a la comisión de investigación que este viernes se constituye en el Congreso. La Ejecutiva socialista ultimará hoy su estrategia.

Aunque la dirección del PSOE, que hoy se reúne en Santiago de Compostela tras el paréntesis vacacional, no quiere que el caso Gescartera eclipse su labor de oposición, lo cierto es que el escándalo político-financiero de la sociedad de valores intervenida en junio pasado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se ha convertido en el inevitable punto de referencia del nuevo curso. El jueves, en un pleno extraordinario, el Congreso dará luz verde a una comisión de investigación que se constituirá al día siguiente.

De momento, los socialistas no van a pedir la dimisión de ningún ministro. Pero no porque excluyan responsabilidades políticas. Al contrario, apuntan más alto. Directamente al presidente del Gobierno, José María Aznar, a quien responsabilizan de haber creado, con su política, un 'Estado anoréxico', desprovisto de los controles necesarios para atajar los manejos de quienes, confundiendo intereses públicos con privados, se mueven en los aledaños del poder.

'Ya hemos comprobado que la filosofía política de Aznar, al promover menos poder para el Gobierno, porque entiende que así es mejor para los ciudadanos, no es un deseo, sino una realidad, porque cada vez hay menos Gobierno, menos democracia. Los controles y los ministros brillan por su ausencia', afirmó el portavoz del grupo socialista, Jesús Caldera.