HUGH GRANT SE TOMA UN RESPIRO EN SU CARRERA

A pesar de sus últimos éxitos en el cine, tanto en la taquilla -con El diario de Bridget Jones- como con los críticos -gracias a Granujas de medio pelo-, Hugh Grant se retira de la interpretación. Al menos temporalmente, aunque amenaza con pasar a mayores. El londinense, que cumplirá 41 años el próximo 9 de septiembre, ha decidido calmarse, analizar su vida y superar la reciente muerte de su madre, Fyonna, fallecida el pasado mes a los 63 años a causa de un cáncer.

En declaraciones a diversos medios británicos, el galán, que ha convertido su ficticio tartamudeo en un arma ...

A pesar de sus últimos éxitos en el cine, tanto en la taquilla -con El diario de Bridget Jones- como con los críticos -gracias a Granujas de medio pelo-, Hugh Grant se retira de la interpretación. Al menos temporalmente, aunque amenaza con pasar a mayores. El londinense, que cumplirá 41 años el próximo 9 de septiembre, ha decidido calmarse, analizar su vida y superar la reciente muerte de su madre, Fyonna, fallecida el pasado mes a los 63 años a causa de un cáncer.

En declaraciones a diversos medios británicos, el galán, que ha convertido su ficticio tartamudeo en un arma de seducción, confiesa: 'Mi madre era para mí la mujer más importante del mundo y acabo de descubrir lo duro que es vivir sin ella'. Durante años, Fyonna fue su consejera. Ella le apoyó en los difíciles momentos que vivió Grant en su carrera artística y en su relación sentimental con la actriz y modelo Elizabeth Hurley, cuando fue detenido en 1995 en Los Ángeles en un coche con la prostituta Divine Brown. La policía le acusó de conducta lasciva. Su madre le animó, Hurley le perdonó y Divine Brown se hizo de oro contando su ratito de pasión con Grant por los programas más truculentos de la televisión estadounidense.

Fyonna volvió al rescate de su hijo cuando el actor se separó de Hurley, después de 13 años de relación sentimental, que comenzó en el rodaje de Remando al viento, de Gonzalo Suárez, en 1987. Así que es lógico que Hugh Grant esté pasando un mal rato.

Pero además el británico no parece muy satisfecho con su carrera interpretativa: 'No estoy interesado en buscar más papeles. Me voy a tomar un tiempo de descanso y a reorganizar mi vida y mis pensamientos'. De ahí su alejamiento de los círculos cinematográficos, aunque no de los artísticos. 'He decidido dedicar la mayor parte de mi tiempo a la escritura de varios guiones y una novela. A lo mejor nunca se publican, ni se los enseño a nadie, pero al menos me habré tomado un respiro de la actuación y me habré dedicado más a mí mismo. ¿Quién sabe? Puede que decida no volver jamás al cine. Lo único que sé es que quiero encontrar una labor que me haga feliz'.

Pocos actores cumplen tamañas amenazas de retirada definitiva, pero sí es cierto que de vez en cuando alguno realiza un descanso temporal. Grant ya ha empezado a rechazar ofertas, escudándose en su reorganización vital. Sus últimos rodajes han sido Granujas de medio pelo, de Woody Allen, El diario de Bridget Jones, de Sharon Maguire, y About a boy, la historia de un hombre inmaduro, interpretado por Grant, que se comporta como un niño. El filme, pendiente de estreno y dirigido por los iconoclastas hermanos Chris y Paul Weitz (creadores de Hormigaz y American pie), se basa en una novela de Nick Hornby (Alta fidelidad y Fuera de juego).