El actor Javier Albalá, fuera de peligro tras el navajazo sufrido
Liberto Rabal dice que el rodaje no requería permiso municipal
El actor Javier Albalá, de 32 años, protagonista de las series Abogados (Telecinco) y Raquel busca su sitio (Televisión Española), permanece ingresado en el Hospital Clínico pero ya está fuera de peligro tras el navajazo que sufrió accidentalmente en la madrugada del miércoles durante un ensayo previo al rodaje de la película Síndrome, que dirigirá el también actor Liberto Rabal. Albalá se clavó la navaja en la cara interna del muslo derecho y se seccionó la arteria femoral.
Los responsables de la película aseguran que el accidente ocurrió cuando Albalá trató de cer...
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El actor Javier Albalá, de 32 años, protagonista de las series Abogados (Telecinco) y Raquel busca su sitio (Televisión Española), permanece ingresado en el Hospital Clínico pero ya está fuera de peligro tras el navajazo que sufrió accidentalmente en la madrugada del miércoles durante un ensayo previo al rodaje de la película Síndrome, que dirigirá el también actor Liberto Rabal. Albalá se clavó la navaja en la cara interna del muslo derecho y se seccionó la arteria femoral.
Los responsables de la película aseguran que el accidente ocurrió cuando Albalá trató de cerrar la navaja, de ocho centímetros de hoja, contra su pierna. La policía mantiene otra versión: el actor se clavó la navaja en el fragor del ensayo de una escena. Albalá debía atacar a otro actor, Francisco Brives, por la espalda y clavarle la navaja. Ambos cayeron de espaldas y fue entonces cuando Albalá se clavó la navaja.
El actor ensayaba una escena de Síndrome, que será la segunda película como director de Liberto Rabal, que ya tiene en marcha el largometraje In, según aclaró ayer. El ensayo se desarrollaba en la madrileña calle de Pelayo, en el céntrico barrio de Chueca. 'La grabación se hizo en vídeo, no con cámaras de cine', dijo Rabal.
Para rodar una escena de una película, es necesario el permiso municipal. La grabación de esta secuencia no contaba con permiso alguno. 'No estábamos rodando una escena. Sólo era un ensayo de lo que puede ser la película. No teníamos ni el equipo de cine, sólo una cámara de video. Era un vídeo casero, y para eso no se requiere un permiso del Ayuntamiento', explicó Rabal.