Álvaro Montes abre la puerta grande en Alicante

El rejoneador jiennense Álvaro Montes fue el primero en abrir la puerta grande de Alicante. Lo consiguió tras vibrante actuación, en la que el dominio en la monta y la ayuda del burel pusieron en sus manos las dos orejas que le franquearon el triunfo.

En este primer festejo de la tradicional Feria de les Fogueres de San Juan, con casi tres cuartos de entrada y ante toros despuntados de Benítez Cubero, participó también João Moura, quien con su maestría no tuvo problemas en clavar con facilidad y sin demasiados apuros al que abrió plaza. Dio una vuelta al no poner digno colofón con los r...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El rejoneador jiennense Álvaro Montes fue el primero en abrir la puerta grande de Alicante. Lo consiguió tras vibrante actuación, en la que el dominio en la monta y la ayuda del burel pusieron en sus manos las dos orejas que le franquearon el triunfo.

En este primer festejo de la tradicional Feria de les Fogueres de San Juan, con casi tres cuartos de entrada y ante toros despuntados de Benítez Cubero, participó también João Moura, quien con su maestría no tuvo problemas en clavar con facilidad y sin demasiados apuros al que abrió plaza. Dio una vuelta al no poner digno colofón con los rejones de muerte.

Peor suerte tuvo Andy Cartagena, que pechó con un mansurrón con el que todo lo tuvo que poner el de Benidorm para, al final, no lucir. Incluso su famoso violín lo hizo sonar a la tercera. Tampoco acertó con los de muerte y sólo escuchó una ovación.

El portugués Diego Ventura no tuvo facilidades del que hizo cuarto. Clavó banderillas con desigual sitio, aunque expuso hasta tocarle el burel un par de veces la grupa al equino. Mató al tercer intento y ante la espectacular doma dio la vuelta al ruedo.

Con las inevitables colleras, Moura y Montes lucieron cabriolas, carreras, jinetas y cuantos alardes ecuestres llevaban en repertorio. Mataron al segundo intento descordando al bicorne. Dieron un vuelta en recompensa. Pusieron punto y final Andy Cartagena y Ventura. El paisano no tuvo su tarde y al más encastado y móvil toro de la corrida tampoco supo sacarle provecho. Eso quedó para Ventura, que dio una lección de monta y tuvo más acierto a la hora de clavar, llevando el peso de la collera y el mérito de la oreja conseguida.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En