Crítica:VISTALEGRE

¡Una novillada brava!

Una gozada ayer por la mañana en la plaza de toros de Carabanchel, que tiene el título de palacio, con los novillos de María Luisa Paniagua. Muy bien, ganadera. Desarrollaron todos los bureles casta y nobleza, en diferentes niveles, y les ofrecieron a los espadas una buena oportunidad, en una plaza apropiada y generosa en tales eventos. De la que salió mejor parado el novillero mexicano Alejandro Maya, que corto la única oreja del festejo.

En su primero Maya enseñó su buen corte en los lances de saludo, limpios y templados, de justo remate. Y con la muleta consiguió una buena primera se...

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Una gozada ayer por la mañana en la plaza de toros de Carabanchel, que tiene el título de palacio, con los novillos de María Luisa Paniagua. Muy bien, ganadera. Desarrollaron todos los bureles casta y nobleza, en diferentes niveles, y les ofrecieron a los espadas una buena oportunidad, en una plaza apropiada y generosa en tales eventos. De la que salió mejor parado el novillero mexicano Alejandro Maya, que corto la única oreja del festejo.

En su primero Maya enseñó su buen corte en los lances de saludo, limpios y templados, de justo remate. Y con la muleta consiguió una buena primera serie de clásico contenido. Pero se vió un algo desbordado por la casta del burel, que le dió una voltereta. Para en su segundo, noble y que le dejaba colocarse, volver a torear bien de capa y lograr una faena templada y elegante, mejor al natural, y bien adornada, incluso sentida.

Jorge Arellano demostró estar poco toreado, y en sus dos novillos le faltó reposo y técnica. Aunque derrochó ganas e ilusión, que es lo mínimo que se le puede exigir a un novillero. Sufrió varios desarmes en su primero durante el tercio de muleta. Y se vió en apuros ante la codicia de los bureles de Paniagua. Puso banderillas con facilidad, siendo los pares al quiebro y por dentro, los más meritorios, así como los doblones con los que principió sus dos faenas muleteriles. Serafín Marín cuidó a su primero, que se partió un pitón al rematar en tablas de salida. Al que le hizo una faena templada y de buena técnica. Y en su segundo, toreó bien con el percal y estropeó una entonada faena de muleta al utilizar mal la espada y el descabello. Faena comenzada de pedresina espectacular y seguida por tandas de redondos de muy buena factura. Al terminar la novillada el mayoral saludó. Un triunfo.

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