El novillero Barragán debuta esta tarde en Las Ventas
Le ha costado. El albaceteño Abraham Barragán llega por fin a Las Ventas tras tres intentos frustrados. 'Hubo problemas con la contratación, ya pasados, y no es el momento de sacarlos a colación', puntualiza. Debutó con caballos hace tres temporadas (en junio de 1999), tiene 21 años y, junto a la hoja de servicios inmaculada, presenta las preceptivas ganas e ilusiones. 'Ha sido complicado, pero aquí estoy', tercia parco y preciso.
De momento, junto a la corrida de hoy, frente a novillos de Sorando y con Sergio Aguilar y Leandro Márquez de compañeros, su nombre figura en la novillada de ...
Le ha costado. El albaceteño Abraham Barragán llega por fin a Las Ventas tras tres intentos frustrados. 'Hubo problemas con la contratación, ya pasados, y no es el momento de sacarlos a colación', puntualiza. Debutó con caballos hace tres temporadas (en junio de 1999), tiene 21 años y, junto a la hoja de servicios inmaculada, presenta las preceptivas ganas e ilusiones. 'Ha sido complicado, pero aquí estoy', tercia parco y preciso.
De momento, junto a la corrida de hoy, frente a novillos de Sorando y con Sergio Aguilar y Leandro Márquez de compañeros, su nombre figura en la novillada de Nazario Ibáñez del 30 de mayo, en pleno fragor de San Isidro. La temporada no puede ir mejor. Lleva ya siete tardes con trabajo, dos en Vistalegre (Madrid) y tres en San Sebastián. 'El año pasado llegué a las 50 novilladas', añade. Pero ahí no acaba la cosa. La primera cita del ciclo isidril, en la llamada miniferia de la Comunidad de Madrid, tiene aún un puesto vacante. En el cartel luce el letrero de reservado para 'el triunfador del 1 de abril'. O sea, el que salga victorioso de la cita de hoy a las seis.
Y en ésas están los tres y especialmente el vallisoletano Leandro Hernández, de 19 años, que es el único de la terna sin sitio en la feria. En lo que va de año ha toreado más que nadie, pero sin puesto en la convocatoria más importante del año. A su lado, Sergio Aguilar respira sólo a medias tranquilo. Tiene puesto en San Isidro, pero en la tarde de los nada cómodos astados de Baltasar Ibán. Será el 21 de mayo. El madrileño, de 20 años, reaparece en Madrid tras la oreja que cortó el 9 de abril del año pasado; un trofeo que le costó caro. Tras el triunfo, con el segundo novillo vino una lesión que le ha tenido en boxes hasta el 10 de marzo último, que toreó en San Sebastián.
Así las cosas, tres novilleros de postín para la última cita del escalafón inferior antes del ciclo de San Isidro. Por cierto, ¿y la alternativa, para cuándo? 'Quiero que sea en mi tierra, en la corrida de Asprona, en junio. Independientemente de lo que pase en las próximas citas, he hecho méritos y estoy preparado', dice Barragán.