GENTE

MUCHO DOMINÓ, POCA PESCA

El presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, ha vuelto a cumplir con su anual rito de pesca en Asturias. El jueves por la noche se estableció, como es tradición, en Niserias, en el municipio de Pemamellera Alta, en pleno desfiladero del Cares, y a primeras horas del viernes, ataviado como mandan los cánones, se adentró en el río, aunque sin éxito. Las truchas no le fueron favorables. Tampoco el sábado, pese a que anteayer se sumó al intento otro pescador avezado, el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, a quien acompañaba su esposa, Gema Ruiz, y el hijo de ...

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El presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, ha vuelto a cumplir con su anual rito de pesca en Asturias. El jueves por la noche se estableció, como es tradición, en Niserias, en el municipio de Pemamellera Alta, en pleno desfiladero del Cares, y a primeras horas del viernes, ataviado como mandan los cánones, se adentró en el río, aunque sin éxito. Las truchas no le fueron favorables. Tampoco el sábado, pese a que anteayer se sumó al intento otro pescador avezado, el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, a quien acompañaba su esposa, Gema Ruiz, y el hijo de ambos, Alfonso. Las sesiones de pesca entre las escarpadas y abruptas montañas de las estribaciones de los Picos de Europa se prolongaron hasta ayer por la tarde y se alternaron, como es hábito de Fraga y de los amigos que lo suelen acompañar en estas incursiones fluviales, con las partidas de dominó y la tertulia. Pero aunque fue en estos parajes y en similares circunstancias pescadoras, donde un entonces jovencísimo Álvarez Cascos se ganó la confianza de Fraga a fines de los años setenta, antesala de su rauda carrera política, aseguran los asiduos a estos encuentros ribereños que la política es asunto vedado en tales cónclaves de pescadores.-

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