GENTE

GIRA PROMOCIONAL DE CAMILLA

El príncipe Carlos de Inglaterra ha mandado cuatro días a Nueva York a su amiga de toda la vida, Camilla Parker Bowles, para que encandile a la alta sociedad americana y de paso consiga ganar algo de popularidad en su país y en el propio palacio real. Carlos le pagó a su amante el millón de pesetas que cuesta atravesar el Atlántico en el Concorde, le gestionó el alojamiento del primer día en la mansión de unos amigos y le procuró una serie de citas para almorzar, cenar y tomar el té con esposas de millonarios y otros miembros de la élite neoyorquina con los que el príncipe mantie...

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El príncipe Carlos de Inglaterra ha mandado cuatro días a Nueva York a su amiga de toda la vida, Camilla Parker Bowles, para que encandile a la alta sociedad americana y de paso consiga ganar algo de popularidad en su país y en el propio palacio real. Carlos le pagó a su amante el millón de pesetas que cuesta atravesar el Atlántico en el Concorde, le gestionó el alojamiento del primer día en la mansión de unos amigos y le procuró una serie de citas para almorzar, cenar y tomar el té con esposas de millonarios y otros miembros de la élite neoyorquina con los que el príncipe mantiene estrechas relaciones. Es pronto para conocer los resultados de esta campaña de promoción de Camilla pero, de momento, los periódicos sensacionalistas de la gran manzana han sido tan displicentes con la dama como lo suelen ser sus colegas británicos: "El Rottweiler anda suelto en Nueva York", tituló el lunes el New York Post. El rotativo justificaba su atrevimiento recordando que la princesa Diana llamaba así a la amante de su marido. Camilla almorzó el lunes con Brooke Astor, que a sus 97 años es considerada como la gran dama de la sociedad neoyorquina y la noche del martes la dedicó a recorrer las sofisticadas galerías de arte del Soho. Hoy volverá a Londres.- ,

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