GENTE

SIN SECRETOS

La pareja de holandeses que forman los veinteañeros Dorien y Rob Timmerman tiene poco que ocultar. Al menos así se desprende de su decisión de dejar que se sustituya el tejado del ático en el que viven en la ciudad de Utrecht por un techo de cristal que dejará su vida expuesta a las indiscretas miradas de los visitantes de la torre de la catedral. La brillante idea ha salido de la cabeza de un artista estadounidense, Otto Berchem, que está realizando un peculiar proyecto en toda Holanda, denominado Panorama 2000. Berchem se ha inspirado en esa costumbre calvinista tan visi...

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La pareja de holandeses que forman los veinteañeros Dorien y Rob Timmerman tiene poco que ocultar. Al menos así se desprende de su decisión de dejar que se sustituya el tejado del ático en el que viven en la ciudad de Utrecht por un techo de cristal que dejará su vida expuesta a las indiscretas miradas de los visitantes de la torre de la catedral. La brillante idea ha salido de la cabeza de un artista estadounidense, Otto Berchem, que está realizando un peculiar proyecto en toda Holanda, denominado Panorama 2000. Berchem se ha inspirado en esa costumbre calvinista tan visible en Amsterdam de dejar por las noches abiertas las cortinas de las casas como invitando a cotillear, invitación que la estricta moral obliga a rechazar y deja al personal casi estrábico con un ojo puesto en el salón y otro en los coches de la calle. En las habitaciones que desde junio y durante cuatro meses van a quedar a la vista de los que quieran sacarse la espina de nunca poder mirar con tranquilidad, Dorien y Rob comen, duermen y trabajan. Afortunadamente para ellos, que han reconocido que cobran aunque no han dicho cuánto, el cuarto de baño queda, lejos de los espías, en el piso de abajo.- ,

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