CON EDAD PARA AMARSE
Dicen que el amor y la pasión no entienden de edades. Así lo han creído Dionisia Claramonte Castilla, de 93 años, y Francisco López Portales, de 84, que el sábado pasado contrajeron matrimonio en la residencia geriátríca Nazaret de la población de Mora d'Ebre (Tarragona). Aunque los familiares de los novios no pudieron asistir a la ceremonia, sí lo hicieron los casi ochenta ancianos internados, que celebraron la boda por todo lo alto, comiendo incluso el típico pastel de boda. Como en todos los matrimonios, el día anterior hubo despedida de soltero y soltera; a la que acudió un n...
Dicen que el amor y la pasión no entienden de edades. Así lo han creído Dionisia Claramonte Castilla, de 93 años, y Francisco López Portales, de 84, que el sábado pasado contrajeron matrimonio en la residencia geriátríca Nazaret de la población de Mora d'Ebre (Tarragona). Aunque los familiares de los novios no pudieron asistir a la ceremonia, sí lo hicieron los casi ochenta ancianos internados, que celebraron la boda por todo lo alto, comiendo incluso el típico pastel de boda. Como en todos los matrimonios, el día anterior hubo despedida de soltero y soltera; a la que acudió un nieto de Francisco llegado de Menorca, quien aprovechó para hacer las fotos oficiales de los novios. Francisco y Dionisia podrán ver así cumplido su deseo de compartir la misma habitación de la residencia con la intención de cumplir juntos el siglo de vida-