TVE ya graba en Barcelona los 130 nuevos capítulos de 'Barrio Sésamo'

Salim es un joven estudiante magrebí que en sus tiempos Ubres trabaja en la cafetería de un hotel. Podría ser la vida real, pero Salim es en realidad un actor y su verdadero nombre es Karim Alami. Desde el pasado lunes, el joven forma parte del equipo que graba los nuevos episodios de Barrio Sésamo en uno de los platós de Televisión Española en Cataluña. Los 130 capítulos de esta etapa se emitirán en septiembre u octubre. En ellos aparecen los cuatro muppets o muñecos españoles, Gaspar, Vera, Bubo y Blukie, el sustituto de Espinete.

Desde el pasado lunes, un decorado de grandes dimensio...

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Salim es un joven estudiante magrebí que en sus tiempos Ubres trabaja en la cafetería de un hotel. Podría ser la vida real, pero Salim es en realidad un actor y su verdadero nombre es Karim Alami. Desde el pasado lunes, el joven forma parte del equipo que graba los nuevos episodios de Barrio Sésamo en uno de los platós de Televisión Española en Cataluña. Los 130 capítulos de esta etapa se emitirán en septiembre u octubre. En ellos aparecen los cuatro muppets o muñecos españoles, Gaspar, Vera, Bubo y Blukie, el sustituto de Espinete.

Desde el pasado lunes, un decorado de grandes dimensiones acoge una torre de Babel televisiva. Josep Maria Vidal, director del programa, pasa del catalán al castellano en las instrucciones que da a los actores. No se trata de un capricho; los 20 actores de carne y hueso y los cuatro muppets españoles de esta nueva etapa -Gaspar, Vera, Bubo y Blukie: este último es el sustituo de Espinete, su nombre ha sido escogido por los niños- graban dos veces, una en cada idioma, la misma secuencia. La diversidad será uno de los ejes del programa. En el nuevo Barrio Sésamo, se han instalado, además de Salim, una familia gitana y un guineano que regenta La Primavera, la frutería. Además del hotel, el decorado reproduce la entrada de un gran mercado, una parada de bisutería y artesanía, un puesto de cacharros de cocina, una pescadería, una mercería, una tienda de juguetes, una librería, y una cestería.Antes de grabar la última secuencia, Brady, el faquir, se empolva las manos con talco. Se dispone a desaparecer de escena trepando por una cuerda. Después de varias tomas, sus manos están enrojecidas. En otro escenario, una muppet que luce sombrero de ala se va en avión. En tierra queda uno con gabardina. Se dirige al bar: "Vuelve a recitar el abecedario, Sam". Para los niños, sólo será una manera de memorizar las letras. Para los mayores, un guiño. Éste es uno de los objetivos del nuevo Barrio Sésamo, atraer también a los adultos. Sus responsables creen que así, se refuerza la eficacia educativa del programa.

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