EL CASCABEL AL MINISTRO

El ministro de Defensa ruso, Pável Grachov, tendrá un serio disgusto si prospera la orden de la juez Olga Góvorova de llevarlo al juzgado por la fuerza. Sucede que el general Grachov recurrió en octubre de 1994 a los tribunales moscovitas "en defensa de su dignidad", que, según él, fue pisoteada por el popular diario Moskovski Komsomólets en el artículo titulado 'El ladrón debe estar en la cárcel, y no ser ministro de Defensa'. Pero desde que la causa comenzó su vista oral, a principios de año, Pável Grachov no se ha presentado ni una sola vez en el juicio. Ayer, la pacien...

El ministro de Defensa ruso, Pável Grachov, tendrá un serio disgusto si prospera la orden de la juez Olga Góvorova de llevarlo al juzgado por la fuerza. Sucede que el general Grachov recurrió en octubre de 1994 a los tribunales moscovitas "en defensa de su dignidad", que, según él, fue pisoteada por el popular diario Moskovski Komsomólets en el artículo titulado 'El ladrón debe estar en la cárcel, y no ser ministro de Defensa'. Pero desde que la causa comenzó su vista oral, a principios de año, Pável Grachov no se ha presentado ni una sola vez en el juicio. Ayer, la paciencia de la juez se agotó cuando recibió una nueva carta del Estado Mayor General en la que decía que Grachov no podía asistir al proceso por estar muy ocupado. El problema ahora es que, como comentó el subjefe del departamento de policía en cuya jurisdicción se encuentra el juzgado que lleva esta causa de difamación, "la orden contra Grachov es técnicamente difícil de cumplir".-