Fallece Joaquín Prat, uno de los hombres más brillantes de la radio y la televisión
Joaquín Prat, uno de los hombres emblemáticos de la radio y la televisión en España, falleció ayer en la clínica madrileña de Puerta de Hierro tras casi dos meses en estado de coma. Un infarto de miocardio le había llevado al hospital el 6 de abril, directamente desde el estudio, en el que se encontraba trabajando, y lo demás ha sido una lucha entre sus ganas de vivir y la infección generalizada que sufrió posteriormente. La capilla ardiente ha sido instalada en el propio hospital y sus restos mortales serán traslados esta tarde, a las 17.00 horas, al cementerio de la Almudena.”Tras dos meses de lucha, mi padre estaba ya cansado de luchar. Ahora descansa”, declaró ayer a la puerta del velatorio Joaquín Prat, uno de los hijos del periodista. Tanto él como su madre, Marianne Sandberg, se encontraban en el hospital cuando se produjo el fatal desenlace.
"Por expreso deseo de mi padre, será incinerado y sus cenizas las arrojaremos al mar en Mallorca, donde él había pasado momentos inolvidables", añadió el hijo de Joaquín Prat. Su viuda abandonó los velatorios de la clínica Puerta de Hierro, visiblemente afectada, alrededor de las 22.15, y sólo pudo decir una frase: "Ya descansa tranquilo". Por la mañana había entrado en la UVI para despedirse de su marido, al ser informada de la extrema gravedad de su estado.
Joaquín Prat se había casado en 1973 en Dinamarca con Anne, una irlandesa con la que tuvo dos hijas, Anabel y Susana. En 1984 se divorció y contrajo nuevo, matrimonio con la danesa Marianne Sandberg, con la que ha tenido cuatro hijos: Joaquín, Alexandra, Federico y Andrea.
Animador nato
Con Joaquín Prats desaparece un hombre cuyo dominio de la palabra y su carácter de animador nato le convirtieron en uno de los comunicadores más apreciados. Valenciano, de 63 años, había proyectado el regreso de Un millón para el mejor, uno de los programas que más fama le habían dado en Televisión Española en los años sesenta, junto con el espacio Galas del sábado, al lado de Laura Valenzuela.
La que fuera su compañera profesional le recuerda así: "Era un gran amigo y un gran compañero. Sólo puedo dedicarle palabras bonitas porque fue una gran persona que me ayudó muchísimo en mi carrera".
En ese mismo programa saltaron a la fama muchos artistas; entre otros, se dieron a conocer los humoristas Tip y Coll. Muy emocionado, José Luis Coll expresó su pesar por la muerte del presentador. "Era un gran amigo y compañero. A Joaquín no se le podían encontrar defectos. Era un tipo fenomenal".
Joaquín Prat estudió Derecho en Valencia, pero tuvo que interrumpir sus estudios tras la quiebra de la empresa de su padre. Trabajó como auxiliar administrativo en Standard y abandonó este puesto para viajar por Europa. A los 26 años regresó a Valencia, donde ingresó como locutor de Radio Nacional. Más tarde pasó a Radio Valencia, de la cadena SER. En 1964 se incorporó a Radio Madrid como ayudante de Vicente Marco e intervino en Mañanas de Radio Madrid y Ustedes son formidables.
Otro hombre de radio, José Luis Pécker, lo ha recordado oportunamente: Prat fue "el inventor de la madrugada de la radio, que hace años era un espacio perdido". En julio de 1964, Joaquín Prat se hizo cargo de Radio Madrid madrugada. También se puso al frente de Carrusel Deportivo, todo ello en la SER.
En 1966 se incorporó a Televisión Española para presentar Un millón para el mejor, uno de los concursos más populares de los años sesenta. Dos años, más tarde pasó Galas del sábado, de nuevo con Laura Valenzuela.
Trabajó como actor de cine y de teatro. Representó obras de los hermanos Álvarez Quintero, Muñoz Seca y Lope de Rueda. Escribió numerosos guiones radiofónicos y no escapó a la tentación de la música, grabando el disco Ven a cantar.
17 millones de espectadores
Simultáneamente con su trabajo en la radio presentó en TVE. El precio justo, que fue seguido por una media de 17 millones de espectadores por programa, lo que le alzó a uno de los primeros puestos de la lista de audiencias. Entre abril y mayo de 1989 se encargó de la animación del espectáculo que la COPE presentaba al finalizar cada etapa de la Vuelta Ciclista a España. En noviembre de 1989 emprendió una nueva etapa de El precio justo, alcanzando un récord por el mayor premio entregado en televisión: 40 millones de pesetas.
Su larga trayectoria profesional fue reconocida a través de numerosos premios. Las pasadas navidades, Joaquín Prat retransmitió las campanadas de Año Nuevo en la cadena pública, Un feliz 1995 deseó a todos.