Patti Davis, la hija de Ronald Reagan, aparecerá desnuda en 'Playboy'

Patti Davis, de 41 años, hija del ex presidente de Estados Unidos Ronald Reagan y de su esposa, Nancy, aparecerá desnuda en el número del próximo mes de julio de la revista Play boy, que la anuncia como "la hija renegada de Ronald Reagan". Patti, que desde 1974 utiliza su apellido materno para superar una crisis de identidad no sólo no comparte la ideologia conservadora de su padre sino que criticó públicamenete las políticas sociales de la Administración de éste y participó en actos, denunciando la carrera de armamentos.Como actriz tuvo también divergencias con su familia al...

Patti Davis, de 41 años, hija del ex presidente de Estados Unidos Ronald Reagan y de su esposa, Nancy, aparecerá desnuda en el número del próximo mes de julio de la revista Play boy, que la anuncia como "la hija renegada de Ronald Reagan". Patti, que desde 1974 utiliza su apellido materno para superar una crisis de identidad no sólo no comparte la ideologia conservadora de su padre sino que criticó públicamenete las políticas sociales de la Administración de éste y participó en actos, denunciando la carrera de armamentos.Como actriz tuvo también divergencias con su familia al participar encarnando a una prostituta en una serie de televisión. En 1986 publicó una novela autobiográfica, Home front, que cuenta la vida de Beth Canfield, una joven rebelde, cuyo padre, ex gobernador de California, llega a presidente. Por el contrario, la protagonista se presenta como una activista universitaria, partidaria del amor y no de la guerra, amante de la marihuana y contraria a la guerra de Vietnam.

En 1992 pasaba de la ficción a la realidad con la publicación de su autobiografía, The way I see it (Tal y como yo lo veo), en la que daba una desagradable visión del hogar de los Reagan. Su padre aparece como distante e indiferente, su madre como adicta a los tranquilizantes y a las píldoras de régimen alimenticio, y denuncia los malos tratos a que la sometió durante su niñez. "Recuerdo", afirma, "la primera vez que me sacudió cuando yo tenía ocho años. Esto fue aumentando a medida que me hacía mayor, y se convirtió en un acontecimiento semanal y a veces diario".