El Gobierno propone que la patronal y los sindicatos gestionen el desempleo

El ministro de Economía, Carlos Solchaga, desveló ayer una de las claves de las reformas estructurales de la economía, al anunciar en el debate de los Presupuestos del Estado la disposición del Gobierno a ceder la gestión del seguro de paro a empresarios y sindicatos. El debate presupuestario se caracterizó por el enfrentamiento entre Solchaga y el presidente del Partido Popular, José María Aznar. El ministro acusó a Aznar de "Italianizar la economía" y Aznar a Solchaga, de poca credibilidad.

Si prospera la propuesta que Solchaga formuló ayer en el Congreso de los Diputados, los agentes...

El ministro de Economía, Carlos Solchaga, desveló ayer una de las claves de las reformas estructurales de la economía, al anunciar en el debate de los Presupuestos del Estado la disposición del Gobierno a ceder la gestión del seguro de paro a empresarios y sindicatos. El debate presupuestario se caracterizó por el enfrentamiento entre Solchaga y el presidente del Partido Popular, José María Aznar. El ministro acusó a Aznar de "Italianizar la economía" y Aznar a Solchaga, de poca credibilidad.

Si prospera la propuesta que Solchaga formuló ayer en el Congreso de los Diputados, los agentes sociales pasarían a gestionar el billón de pesetas largo que ahora se destina al seguro contributivo de paro. Empresarios y sindicatos crearían una mutua que establecería tanto el tipo de cotización por desempleo como la cuantía de la prestación. Todo ello en función de criterios distributivos y no de capitalización, y con la obligación añadida de tener un balance equilibrado, sin pérdidas ni beneficios.El Instituto Nacional de Empleo (Inem), que ahora ejerce esa función, tendría como principal tarea la formación profesional de parados, mientras que la de los jóvenes sin primer empleo dependería de Educación. Los seguros asistenciales de desempleo los pagaría el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Solchaga anunció también la legalización de las agencias de contratación temporal. La propuesta fue acogida con gran escepticismo por la CEOE, mientras que UGT se mostraba cauta y CC OO expresaba su total rechazo.

El debate de los presupuestos sirvió además como escenario para lo que puede considerarse como primer encuentro electoral entre el Gobierno y el PP. Aznar culpó a Solchaga de falta de credibilidad, y el ministro afirmó que la propuesta fiscal de ese partido supone un aumento del gasto de 1,2 billones de pesetas, lo que elevaría el déficit público al 7% del producto interior bruto. Ello equivaldría, a juicio del ministro, a "la italianización de la economía española".

Tanto PP como Izquierda Unida y el Grupo Parlamentario Catalán defendieron enmiendas a la totalidad de los presupuestos, enmiendas que fueron rechazadas por el Pleno.

Páginas 45 y 46