Serra se pone al frente de los renovadores del PSOE
Narcís Serra, vicepresidente del Gobierno, ha optado por no rehuir la batalla en el seno del PSOE y se ha puesto al frente de la corriente renovadora del partido gubernamental. Serra, con ello, se enfrenta al aparato del PSOE, y muy particularmente a Alfonso Guerra, vicesecretario general del partido.Serra afirmó ayer en Madrid que una mayoría del partido socialista es partidaria de una renovación de la vida política española y del propio PSOE, es decir, que la mayor parte de los militantes suscriben las tesis que el vicepresidente expuso la noche del pasado lunes en Barcelona, donde llegó a d...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Narcís Serra, vicepresidente del Gobierno, ha optado por no rehuir la batalla en el seno del PSOE y se ha puesto al frente de la corriente renovadora del partido gubernamental. Serra, con ello, se enfrenta al aparato del PSOE, y muy particularmente a Alfonso Guerra, vicesecretario general del partido.Serra afirmó ayer en Madrid que una mayoría del partido socialista es partidaria de una renovación de la vida política española y del propio PSOE, es decir, que la mayor parte de los militantes suscriben las tesis que el vicepresidente expuso la noche del pasado lunes en Barcelona, donde llegó a decir que los partidos no son propiedad de unos pocos y que hay que luchar contra "el espíritu de secta".
La intervención de Serra, que puso de relieve el deterioro en que se encuentra la política española y el descrédito de los políticos, constituye, a juicio de cualificados dirigentes socialistas, el más claro alegato que se ha hecho a favor de la renovación de la política y del propio PSOE.
El pasado día 11 por la noche, horas antes de la clausura de la Expo, Serra mantuvo un encuentro en Sevilla con el ministro de Exteriores, Javier Solana; el titular de Educación, Alfredo Pérez Rubalcaba; el presidente andaluz, Manuel Chaves, y el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono. En la conversación, estos dirigentes plantearon la conveniencia de apostar públicamente por la renovación del partido.
El primer paso concreto para ello sería la intervención de Serra, que, según fuentes de los renovadores, contó con el beneplácito previo del secretario general del PSOE, Felipe González.
Página 15