Reportaje:

La aventura planetaria de 'Juanjo Pedales'

Juan José Alonso llega a Cádiz después de dos años dando la vuelta al mundo en bicicleta

Juanjo Pedales, legalmente Juan José Alonso Chueca, llegó ayer al puerto de Cádiz y comenzó la última etapa de su aventura en bicicleta alrededor del mundo. Este madrileño de 32 años ha dejado atrás 70.000 kilómetros, cinco continentes, 30 ruedas inservibles, varias guerras y dos años a golpe de pedal. Ahora sólo le queda llegar a Madrid, después de pasar por Lepe (Huelva), la Expo de Sevilla y Toledo.Rodeado de familiares, amigos, aficionados al sillín y periodistas que esperaban su llegada en barco desde Tánger, el viajero recaló en el Ayuntamiento gaditano para contar los detalles de...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Juanjo Pedales, legalmente Juan José Alonso Chueca, llegó ayer al puerto de Cádiz y comenzó la última etapa de su aventura en bicicleta alrededor del mundo. Este madrileño de 32 años ha dejado atrás 70.000 kilómetros, cinco continentes, 30 ruedas inservibles, varias guerras y dos años a golpe de pedal. Ahora sólo le queda llegar a Madrid, después de pasar por Lepe (Huelva), la Expo de Sevilla y Toledo.Rodeado de familiares, amigos, aficionados al sillín y periodistas que esperaban su llegada en barco desde Tánger, el viajero recaló en el Ayuntamiento gaditano para contar los detalles de su experiencia. Juanjo no defraudó a su público . Narró su paso a través de lugares que fueron el centro de la hístoria cuando rodaba por ellos o poco después. Así, dio ,una visión de primera mano de la guerra en el golfo Pérsico: "Hizo al pueblo iraquí más fuerte el creer que luchaba contra el hereje, a pesar de los problemas de convivencia que caracterizan a estas culturas radicales". También pasé por Yugoslavia antes de su desintegración, y recuerda los conflictos, en Nigeria: "A ellos nadie les hace caso".

Su viaje fue un cúmulo de contrastes. Si lo mejor fue la hospitalidad de la gente que le ayudó "en todo el planeta", su peor recuerdo ha quedado en Argelia, por donde pasó 15 días después del asesinato de su presidente, Mohamed Budiaf, ocurrido el pasado 29 de junio. "Por culpa de unos documentos que me faltaban, me tuvieron detenido todo un día, desnudo y a oscuras, en un cuartucho.. Luego me dejaron marchar sólo con la ropa que llevaba. Fue una gran humillación".

Como anécdota, Juanjo recuerda los problemas que tuvo para cruzar "el único puente de acceso al continente asiático a través del Bósforo, en el que no se permitía el acceso a peatones ni bicicletas". Tuvo que convencer al conductor de una furgoneta para que le trasladase a cambio de pagarle el peaje de la carretera. Otras veces cubrió el salto de los mares en avión.

También le sorprendieron las "distintas épocas" que observó a lo largo de su viaje, dependiendo del lugar donde estuviera. Así, le pareció vivir en los años sesenta cuando, en Bulgaria encontró pintadas en recuerdo de los Beatles y chicas con minifalda. "Es una sociedad donde aún se respiran las protestas en demanda de democracia".

Juanjo se define como deportista y aventurero. Su mayor problema fue el económico. Para poder realizar su viaje tuvo que vender en Madrid todos sus enseres, con lo que consiguió unas 100.000 pesetas. Más tarde obtendría el apoyo financiero de TV-4 y de una firma de bicicletas.

Ha prometido cortarse la melena cuando llegue a Madrid. Se trata de un pacto con su hermano, a quien aseguró que se dejaría crecer el pelo hasta que volviese a casa. Juanjo sabe que en ese momento, a pesar de su experiencia como trotamundos, comenzará para él la verdadera aventura: vivir de nuevo como antes de su gran viaje.

Archivado En