Felipe González Vicén, filósofo

Falleció en Tenerife, a los 83 años de edad, Felipe González Vicén, considerado uno de los padres de la investigación desarrollada en el campo de la filosofía del derecho, de la que fue pionero en España. Especialista en Kant, Marx y Hegel, influyó decisivamente en el pensamiento marxista de posguerra y creó escuela entre los jóvenes filósofos españoles. Desde su magisterio como catedrático de la Universidad de La Laguna (Tenerife), entre 1946 y 1978, y en su vertiente de escritor y ensayista, apadrinó a filósofos y profesores universitarios, como Elías Díaz, Javier Muguerza y Gregorio Peces, ...

Falleció en Tenerife, a los 83 años de edad, Felipe González Vicén, considerado uno de los padres de la investigación desarrollada en el campo de la filosofía del derecho, de la que fue pionero en España. Especialista en Kant, Marx y Hegel, influyó decisivamente en el pensamiento marxista de posguerra y creó escuela entre los jóvenes filósofos españoles. Desde su magisterio como catedrático de la Universidad de La Laguna (Tenerife), entre 1946 y 1978, y en su vertiente de escritor y ensayista, apadrinó a filósofos y profesores universitarios, como Elías Díaz, Javier Muguerza y Gregorio Peces, Barba.González Vicén, nacido en Santander en 1908, falleció víctima de una larga enfermedad. A pesar de su incapacidad física para continuar la labor investigadora en los últimos años, sus familiares han descubierto ahora que desde hacía varios meses trabajaba en tres proyectos inéditos. Su obra, realizada desde Canarias, es amplia y consta de libros y textos que siempre suscitaron interés y debate. Su obra fundamental se reparte entre los estudios que llevó a cabo sobre el neokantismo y el positivismo y el formalismo jurídicos.

Al comienzo de la transición democrática española publicó La desobediencia del derecho, una obra que resultó polémica y que había escrito en las postrimerías del franquismo. González Vicén era un profesor jovial y excéntrico que no renunció en vida a sus principios filosóficos e ideológicos.

La guerra civil le cogió en Sevilla, donde ejercía como catedrático, y fue condenado a muerte. La situación política en la España de entonces acabó empujándolo primero a Francia y después a Alemania. En Berlín reanudó su actividad universitaria. En 1945 regresó a Madrid y fue desterrado a Canarias, dado que para las autoridades de la época tal destino entrañaba un castigo a sus ideas. Durante 20 años compartió su plaza en la Universidad de La Laguna con la condición de catedrático invitado en los cursos de verano de la Universidad de Heidelberg (Alemania).

Sobresalió también en su faceta de traductor de alemán, inglés y francés. Curiosamente, en este último idioma tradujo al español una biografía de Indira Gandhi escrita por Anne Cublier. Estaba casado con una mujer alemana, a la que conoció en Marburgo (Alemania), y tenía cuatro hijos.

Tres años antes de morir fue homenajeado por sus compañeros y discípulos de La Laguna. Recibió la medalla de esta universidad y la de Alfonso X el Sabio del Ministerio de Educación.