Estimable Dmytryk

Hace un par de meses, en el Festival de Cine de Barcelona, varios blacklisted le negaron la palabra a Edward Dmytryk por su comportamiento delator en los años de la odisea inquisitorial maccarthista. Eso volvió a poner sobre el tapete no ya la personalidad de Dmytryk sino su cine, uno de cuyos trabajos más estimables asoma esta madrugada: Encrucijada de odios. Dmytryk fue considerado en los años cuarenta uno de los jóvenes valores del cine americano y, de hecho, lo fue: películas como Historia de un detective, Un hogar de Brooklyn o ésta de hoy así lo confirman, aun...

Hace un par de meses, en el Festival de Cine de Barcelona, varios blacklisted le negaron la palabra a Edward Dmytryk por su comportamiento delator en los años de la odisea inquisitorial maccarthista. Eso volvió a poner sobre el tapete no ya la personalidad de Dmytryk sino su cine, uno de cuyos trabajos más estimables asoma esta madrugada: Encrucijada de odios. Dmytryk fue considerado en los años cuarenta uno de los jóvenes valores del cine americano y, de hecho, lo fue: películas como Historia de un detective, Un hogar de Brooklyn o ésta de hoy así lo confirman, aunque hay que reconocer que atravesó los cincuenta poniendo su oficio a cualquier tema, hasta llegar a los sesenta y aun a los setenta con una cosecha fílmica mediocre.

Encrucijada de odios, decíamos es uno de sus filmes más estimables y forma parte del grueso de su flimografía que toca la llaga de su sociedad. Es un filme de tesis bañado en las aguas genéricas del cine negro.

Las otras películas del día tienen un interés mucho más limitado: A chorus line es la adaptación del taquillero musical de Hollywood por sir Richard Attenborough, y Cristobal Colón, de David MacDonald, un festín en colores de escaso alcance y mucha charlatanería sobre geografía y religión.

Encrucijada de odios se emite a las 7.40 de la mañana; Chorus Line, a las 22.25, y Cristóbal Colón, a las 2.05, todas por TVE-1.