Catalina Morey,
de 82 años, y Lorenzo Coll, de 80, se casaron el sábado en la capilla de la residencia para pensionistas ubicada en el barrio de La Bonanova, en Palma de Mallorca, en la que ambos están alojados. El novio declaró sobre su esposa: "Catalina me gusta toda, entera". Y ella dijo de su marido: "Lo que más aprecio de Lorenzo es su simpatía; además es muy bueno, se le ve". Es la primera boda en esa residencia. Hay otras parejas que comparten apartamento, pero que no se casan para no perder la pensión de viudedad....
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de 82 años, y Lorenzo Coll, de 80, se casaron el sábado en la capilla de la residencia para pensionistas ubicada en el barrio de La Bonanova, en Palma de Mallorca, en la que ambos están alojados. El novio declaró sobre su esposa: "Catalina me gusta toda, entera". Y ella dijo de su marido: "Lo que más aprecio de Lorenzo es su simpatía; además es muy bueno, se le ve". Es la primera boda en esa residencia. Hay otras parejas que comparten apartamento, pero que no se casan para no perder la pensión de viudedad.