GENTE

Leopoldo Calvo Sotelo,

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

ex presidente del Gobierno, ha revelado en Tenerife un secreto de Estado que recibió de su antecesor, Adolfo Suárez. Para ello se remontó a la tarde del 26 de febrero de 1981, fecha de su llegada a la Moncloa. Suárez había abandonado el palacio para viajar en avión a la entonces desconocida isla de Contadora, con el fin de descansar. Los ayudantes militares comunicaron al nuevo inquilino del palacio que había una caja fuerte escondida en un armario del despacho presidencial, de la que poseían la llave pero no la combinación. Como en las novelas policiacas, un experto de las fuerzas de s...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

ex presidente del Gobierno, ha revelado en Tenerife un secreto de Estado que recibió de su antecesor, Adolfo Suárez. Para ello se remontó a la tarde del 26 de febrero de 1981, fecha de su llegada a la Moncloa. Suárez había abandonado el palacio para viajar en avión a la entonces desconocida isla de Contadora, con el fin de descansar. Los ayudantes militares comunicaron al nuevo inquilino del palacio que había una caja fuerte escondida en un armario del despacho presidencial, de la que poseían la llave pero no la combinación. Como en las novelas policiacas, un experto de las fuerzas de seguridad fue requerido para abrirla. Dentro se hallaba sólo un papel con la clave necesaria, lo que decepcionó la curiosidad de Calvo Sotelo y deshizo el misterio.

Más información

Archivado En